Las instituciones como agencias de colocación

Las Palmas de Gran Canaria

Finalmente se consumó y la comisión parlamentaria aprobó ayer los tres adjuntos para el diputado del común. Así que nuestro nuevo defensor del pueblo canario tendrá además de 12 asesores elegidos a dedo, tres adjuntos que vienen de la actividad política, y que mantendrán buenos salarios. Los mismos que un par de días antes han dejado su afiliación al partido por imperativo legal, psoe o pp, para formar parte de la institución.

Me sigue pareciendo todo bastante patético, es decir que salvo que alguien lo cambie, habrá 15 personas elegidas a dedo en el diputado del común de Canarias. Nada más y nada menos. Y nadie se corta un pelo. Dice la norma que debe ser una institución independiente y con el único control parlamentario. Que sus miembros no deben estar afiliados a partido político, lo dejan días antes, dando al traste con el espíritu del legislador.

Esto salvo que el señor Rafael Yanes lo cambie hará que nos salga más cara la herramienta, es decir que en vez de reducir crecemos. Siendo una institución poco conocida y con poca actividad. Por lo menos Nueva Canarias y Podemos dicen que se pronunciarán en contra de la subida del número de personas dependientes de la institución porque no puede ser que suba el presupuesto. Pues parece que perderán la votación. Las grandes organizaciones políticas han pactado seguir colocando gente de los partidos.

Unos usan estos puestos para amarrar apoyos internos para lo pueda suceder y otros para contentar y quitarse de arriba a personas que solicitaban no quedarse fuera de todo. Y lo peor es que a los partidos estas personas les sirven tanto para un roto como para un descocido. Así de triste.

Lo del psoe por un lado y lo del pp por el otro en esto no es admisible, aunque lo hayan hecho otros antes. Que manía de convertir a los partidos en agencias de colocación, lo hacen casi todos, pero donde toca hoy es en el pp y psoe. Precisamente ha sido el pp quien quería eliminar totalmente la institución y lo que hacen ahora es usarla, ya no les parece tan mala, sino que la utilizan para poner gente propia. No han cambiado nada.

Tendrán tantas quejas ciudadanas como para tener tantas personas para tramitarlas. Igual algunos tendrían que buscar algún videojuego para matar el aburrimiento.

Lo que nos hace falta realmente en las islas más puestos de libre concurrencia para que todos puedan luchar con los mismas condiciones por un salario público.