Corinna nos convierte en avestruces

PALMA

Corinna obliga a reeescribir los libros de texto de la asignatura de Historia de España.

Por no hablar de la Historia de Balears, porque ha llegado el momento de plantearse qué nos toca de Corinna.

Los Reyes son los anfitriones en cualquier lugar de su país en que se encuentren.

Salvo en Balears, donde se encuentran durante tanto tiempo que nosotros somos los anfitriones de los Reyes.

Aparte de la discutible publicidad, recibir a los Reyes de huéspedes era “un motivo de orgullo y satisfacción”, parafraseando a Juan Carlos de Borbón.

Hoy no sabemos qué pensar.

Habrán visto que llamamos Rey a Juan Carlos I, pero es que sigue comandando esa categoría regia por 29 años frente a solo cuatro de Felipe VI en el trono.

Otras regiones españoles pueden decir que las andanzas de Don Juan Carlos no les competen, nosotros no tenemos esta opción.

Si es mentira lo que se publica, queremos saber por qué el Rey le contó tantas mendacidades a la mujer con la que compartió varios años de su vida.

Y si es verdad…

Preferimos no imaginar lo que significa si es verdad.

Corinna nos ha convertido en avestruces, con la cabeza bajo tierra.