Luz verde para la aprobación del nuevo pabellón Arena Valencia

Valencia

El mecenas de Valencia Basket, Juan Roig y los representantes políticos del Ayuntamiento de València no quieren marcharse de vacaciones sin haber sellado previamente las condiciones económicas y administrativas que conviertan en una realidad el deseo del máximo accionista del club de baloncesto y que pasa por la construcción de un pabellón multiusos para la ciudad.

El último paso que falta es que el alcalde, Joan Ribó lleve ante el Pleno Municipal del próximo 26 de julio o en su defecto en el inmediato del 26 de septiembre el proyecto que este miercoles ha sido presentado en el registro de entrada del Ayuntamiento y para que consiga el respaldo de todo el consistorio.

El Arena Valencia se situará sobre una parcela de 40.000 metros cuadrados, que Juan Roig siempre estuvo dispuesto a comprar y que está ubicada junto a L´Alquería del Basket. Sin embargo, la configuración política del consistorio valenciano no ha permitido que se le vendiera un suelo público.

La idea que finalmente se ha impuesto para encontrar un consenso entre todas las formaciones políticas ha sido la que defendió València en Comú, con 3 concejales de 33, y que pasa por una concesión administrativa por 50 años. 

Según ha podido saber la Cadena SER, como contraprestación el Ayuntamiento percibirá un canon del 2,7% de los ingresos totales que genere la instalación y sobre la que no impondrá restricciones de uso que limiten la libertad de la nueva sociedad que ha creado Juan Roig, LICAMPA 1617, para gestionar o explotar un recinto en el que invertirá 192 millones de euros (158 del recinto principal y 34 millones del aparcamiento y resto de infraestructuras). 

El sueño de Juan Roig es dejar este legado para la ciudad, hacerlo como una inversión privada y que quede todo en la misma zona: L´Alquería del Basket y el nuevo Arena Valencia, que contará con un parking para 1458 personas. Además, la actividad del pabellón contribuirá a generar aproximadamente 300 puestos de trabajo y un impacto económico (PIB) en la ciudad de València de más de 10 millones de euros anuales.

Por otra parte, Juan Roig prioriza los tiempos y comenzar cuanto antes, porque tiene la convicción de que, si está acabado, se podría celebrar la Final Four de la Euroliga de 2022 o solicitar la celebración de la Copa del Rey.