Los trabajadores sociales consideran un parche el bono de ayuda
Una plaza en una residencia privada cuesta, como mínimo, 1.500 euros.
A Coruña
Reacciones a la decisión de la Xunta de crear un bono de ayuda para las personas dependientes que vayan a una residencia privada. Una media de 490 euros al mes. El Colexio Oficial de Traballo Social de Galicia considera un parche esta medida e insta a la Xunta a crear más residencias públicas. Y es que las listas de espera para una plaza siguen siendo larguísimas y en muchos casos su concesión no llega a tiempo.
Los trabajadores sociales insisten en que la clave es potenciar los recursos públicos ante el creciente número de dependientes en una comunidad como la gallega donde el índice de envejecimiento de su población es más que preocupante. Una plaza en una residencia privada cuesta, como mínimo, 1.500 euros.
A lo largo de este mes podrá solicitarse el bono, tanto para nuevos ingresos como para las personas que ya están en una residencia privada. También en agosto los concellos recibirán el aviso sobre la prestación de nuevas horas de atención en el hogar a dependientes, que se amplían en un millón y medio.