El Santísima Trinidad, a subasta por 152.000 euros
Este jueves acaba el plazo para presentar ofertas y si nadie concurre a la adjudicación directa, "se procederá a la destrucción del bien", según la resolución de Autoridad Portuaria
El Santísima Trinidad en el muelle 7 del Puerto de Alicante / Cadena Ser
Alicante
Este jueves, 16 de agosto a las 14.00 horas, finaliza el plazo de presentación de ofertas para hacerse con el Santísima Trinidad. La réplica del galeón que durante años ha estado amarrado en el muelle del Puerto de Alicante, frente al Casino, y que ha servido como reclamo de ocio y turístico hasta que en octubre de 2016 finalizara la última concesión de tres años otorgada por Autoridad Portuaria.
Desde el día 1 de noviembre de ese año, como ya relató Radio Alicante, se cerró al público con la intención de su propietario de que un comprador se interesara en adquirirlo por 750.000 euros. No fue así y el Ayuntamiento, con Gabriel Echávarri como alcalde, tampoco mostró interés en hacerse con él a pesar de la oferta de su dueño entonces, Ángel Llorente, de donarlo para la ciudad.
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En julio de 2017 la réplica se remolcó desde el muelle 4 hasta el 7, ya apartado del público y con un nuevo dueño, Rafel Ibáñez, de 'Navíos Santísima Trinidad S.L' quien denunció incluso ante el Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana el traslado del barco autorizado por el juzgado.
Lo había adquirido para convertirlo en chatarra, aunque pensaron en mantener su carácter lúdico y para ello repararon una vía de agua y reforzaron y estabilizar el casco, pero Capitanía Marítima no emitió el informe sobre seguridad necesario con el que poder renovar la concesión.
Desde entonces, puede verse cómo se deteriora el Santísima Trinidad en el muelle detrás de centro Comercial Panoramis. Se subasta públicamente por un precio inicial de 152.100 euros. A las 11.00 horas del próximo 6 de septiembre, se abrirán las ofertas que se hayan interesado por esta réplica del navío del siglo XVIII, de 70 metros de eslora, 11 de manga y una superficie de 2.500 metros cuadrados.
En caso de que no concurra nadie a la adjudicación directa, se procederá, puede leerse en la resolución de Autoridad Portuaria, a la destrucción del bien.
