Acusado del crimen de Oza: "Una persona normal no mata a su hijo"

A Coruña

Ha comenzado en la Audiencia Provincial de A Coruña el juicio contra el hombre acusado de asesinar a su hijo de once años con una pala metálica en un bosque de Oza-Cesuras, en mayo del año pasado, coincidiendo con el Día de La Madre. La Fiscalía, la acusación particular, en representación de la madre, la acusación popular, por parte de la Asociación Clara Coampoamor, y la representante de la Xunta coinciden en señalar que este hombre debe ser condenado culpable del asesinato con los agravantes de alevosía y premeditación y con el movil de la venganza hacia su mujer por separarse de él. La pérdida de memoria es el principal argumento de la defensa. Marcos Mirás declaró, apoyado en el atril, que no se acuerda de nada, que estaba enfermo, porque "una persona normal no mata a su hijo".

El Ministerio Fiscal ha solicitado prisión permanente revisable para Marcos Mirás. La defensa pide su total absolución e ingreso en un centro psiquiátrico y de no ser así considerar sus siete enfermedades psiquiátricas diagnosticadas como atenuante. La madre del niño declaró tras un biombo por seguridad. Entre lloros y visiblemente afectada declaró que hacía todo lo posible para que su hijo fuera feliz y mantener aún así la relación con su padre. Dijo que desconocía sus tratamientos psiquiátricos.

Maica reconoció en todo momento el acoso sufrido desde que se casaron, con mensajes intimidatorios a través del movil e incluso las redes sociales con frases como "Todo en esta vida tiene un final, el caso es que nos guste a todos". En 2009 fue condenado por un delito continuado de coacciones y violencia de género. Este hombre llegó incluso a publicar su teléfono en los contactos de prostitución. Asegura que no ha vuelto a salir sola a la calle.

La Asociación Clara Campoamor, que ejerce como acusación popular, se suma a la petición de la prisión permanente revisable.

El abogado del acusado basará su alegato en las enfermedades psíquicas que padecía Marcos Mirás, que llevaba dos meses sin medicación, sumado al consumo de alcohol. Ha afirmado que nunca ha reconocido la autoría del crimen, "que no recuerda nada" aunque ha puntualizado a continuación que "en caso de haberlo hecho no fue consciente de ello".

En su escrito de acusación, el Ministerio Público sostiene que Marcos Mirás ideó un plan y lo ejecutó fríamente, "sin importarle la vida de su hijo y asegurándose de que el menor no fuese socorrido".El pequeño Javier tenía once años.La Fiscal además de solicitar la pena por asesinato , pide que sea concenado a la prohibición de aproximarse a menos de 500 metros de su ex mujer y a no comunicarse con ella por ningún modo durante cinco años más que la duración efectiva de la pena de prisión permanente revisable. También solicita una indemnización para ellas de l67 mil quinientos euros.