Pérez-Torrecilla: "Hay compromisos muy importantes, pero los trasvases van a seguir"

Guadalajara

Con un sabor agridulce. Así salieron los representantes de la Asociación de Municipios Ribereños de Entrepeñas y Buendía de la reunión mantenida este martes en el Ministerio de Transición Ecológica con el secretario de Estado de Medio Ambiente, Hugo Morán.

En el lado positivo, desde la Asociación destacan dos compromisos importantes que ya se habían anunciado por parte del Gobierno y que se ratificaron en ese encuentro: la reactivación de las obras de abastecimiento de Morillejo, que podrían estar acabadas antes de las elecciones de Mayo, y, sobre todo, la presencia de esta asociación en la Comisión de Explotación del Trasvase, donde en estos momentos no hay ningún representante de Castilla-La Mancha.

"Estar en esa Comisión es un paso enorme para los ribereños y para la región", asegura Francisco Pérez-Torrecilla, presidente de este grupo de municipios. "Por fin tendremos voz y voto donde se deciden los trasvases. Es una comisión técnica, pero estoy seguro de que vamos a poder exponer algo más que datos que se podrán valorar antes de tomar las decisiones".

Para conseguirlo, estos ayuntamientos deben constituirse en Mancomunidad, algo que Torrecilla espera que ocurra en pocos meses.

En el lado negativo, destaca la constatación más que evidente, en boca del propio secretario de Estado, de que los trasvases van a seguir produciéndose en los próximos años. "Los trasvases van a seguir y lo tenemos muy claro porque de momento no hay otra forma de procurar agua para el Levante que no sea el Trasvase. Hay compromiso para poner en marcha las desaladoras al 100 por cien, se va a duplicar el agua desalada en 2021, pero hasta entonces los trasvases van a continuar".

Precisamente, desde esta asociación denuncian que, por segundo año consecutivo, los regantes de Estremera han vendido los derechos de 9 hectómetros cúbicos a los regantes del Segura, algo que ya ha autorizado el propio Ministerio. El envío podría producirse de forma inminente puesto que este domingo, 30 de septiembre, termina el año hidrológico al que pertenecen esos 9.000 millones de litros. El año pasado el envío se hizo en las últimas horas del año hidrológico y propició, entre otros factores, la destitución del presidente de la Confederación Hidrográfica del Tajo.