Celda 61: un año sin utilizar

Dueñas

Este, 9 de octubre de 2018, se cumple un año desde que el último interno del Centro Penitenciario La Moraleja de Dueñas (Palencia) pasó por la ya famosa celda 61; apenas estuvo una noche y al día siguiente salió al Hospital a hacerse una placa de rayos. El sindicato de prisiones Acaip recuera que “esta celda afortunadamente ya no se ha vuelto a utilizar. Desde Acaip nos congratulamos de que gracias a nuestra denuncia pública del posible mal uso que se estaba haciendo de esta celda 61, oficialmente denominada celda de evacuación y observación, haya dejado ya de utilizarse”, según expresan en un comunicado.

Inciden en que en esta celda “los internos llegaban a tener estancias de incluso 7 días, como la propia administración reconoce, sin agua corriente, con lavabo y ducha sellados, con las ventanas prácticamente selladas, con muy escasa ventilación e iluminación, con dos cámaras de videovigilancia 24 horas al día, en muchos casos hasta 72 horas en situación de aislamiento provisional, sin salir de la celda para nada, sin ducha, sin lavabo, sin poder fumar, sin radio, sin televisión, sin un periódico o revista, en completo aislamiento, sin poder llamar por teléfono a la familia durante estas primeras 72 horas”.

Estas 72 horas se ampliaron en varios casos hasta los 6 y 7 días, aplicándole al interno el artículo 75.2 del R.P. el cual tiene que ser supervisado por el Juzgado de Vigilancia Penitenciaria. La propia Inspección Penitenciaria en el informe enviado al Juzgado reconoce que en cinco casos de seis la comunicación del artículo 75.2 que el Director de Dueñas realiza al Juzgado de Vigilancia es “errónea”, según recuerda la organización sindical mayoritaria del sector penitenciario.

La propia Inspección Penitenciaria ha informado por escrito de la existencia de un “error” ya que 5 de 6 veces se comunicó al Juez de Vigilancia que los internos habían solicitado el artículo 75.2 a petición propia, cuando en realidad las 6 veces fueron internados por Orden de Dirección como aplicación de limitaciones en su régimen de vida. “Evidentemente en la vida normal, los demás entendemos que 5 de 6 no es un error, sino que se podía estar realizando así para ocultar al Juez de Vigilancia la reclusión en la mencionada celda y con las condiciones en las que se llevaba a cabo. Motivo por el cual se realiza la denuncia”, concluye Acaip.