El SIVE funciona al 25% de su capacidad

Las Palmas de Gran Canaria

Según ha podido saber la Cadena SER, en diciembre de 2017 expiró el contrato que mantenía la empresa adjudicataria para realizar este servicio y desde entonces no se ha renovado. El único radar que funciona en estos momentos es el de Haría que cuenta con también con una cámara al igual que el de Montaña Mina en San Bartolomé, Costa Teguise y Tías, estos dos últimos, cuentan con una cámara. Además el radar de Pechigueras en Yaiza y el del Mirador del Río en Haría, cuyo objetivo era mejorar y ampliar la capacidad del SIVE para la detección de embarcaciones que tratan de alcanzar la isla, tampoco están en funcionamiento porque ni siquiera han sido recepcionadas.

En el caso del Mirador del Río, el radar está empaquetado desde hace tres años en el cuartelillo de la Guardia Civil de Teguise a la espera de que se resuelva un litigio con los propietarios de los terrenos donde está previsto ubicarlo. Ambos aparatos costaron cerca de 6 millones de euros y la garantía del fabricante está en riesgo por tiempo transcurrido sin estar operativo, más de tres años. Las incidencias de cada uno de los radares y cámaras del SIVE son enviadas por la Guardia Civil de Las Palmas en un informe diario a la dirección general de la Guardia Civil. Los aparatos que sufren daños habituales por el desgaste provocado por su proximidad al mar.

El SIVE es un sistema operativo que, sobre un soporte técnico, aporta información en tiempor real a un centro de control que permite intercepta cualquier elemento al territorio nacional desde el mar, según recoge la propia web de la Guardia Civil. El instituto armado subraya la dimensión humanitaria de este sistema de seguridad al facilitar las laborales de identificación y rápido auxilio de las víctimas del tráfico de seres humanos. El SIVE permite no sólo disuadir a las mafias de este tipo de tráfico, sino también salvar muchas vidas humanas.