La Copa devuelve la ilusión

León

El salto al vacío de la Segunda B tiene a los aficionados y a los jugadores de la Cultural en un conflicto de intereses. Los últimos resultados positivos han devuelto al equipo a la zona noble de la clasificación, aunque aún lejos del liderato, su objetivo real, pero las sensaciones que transmite su juego levantan ampollas. Esta temporada parece que ganar es insuficiente, al menos en el Reino de León, escenario donde el sábado se escucharon voces discordantes con la tarea de Víctor Cea y los suyos.

La victoria anestesió los ánimos y la inminencia de la Copa del Rey los agita. Nuevamente la Cultural buscará el billete que le cite con las estrellas, con uno de los grandes del fútbol español (Real Madrid, Barcelona, At. Madrid, Valencia, Sevilla, Betis o Villarreal). Le separan noventa minutos y un rival de Tercera, el Lorca FC, para regresar al bombo de la ilusión. Será en la tercera ronda de la competición en la que, en el formato que fue modificado hace más de una década, el cuadro leonés nunca falla.

Los dos precedentes son triunfales. El 7 de octubre de 2009, bajo el irregular mandato de Josu Uribe, "El Clarino" de Ontinyent le separaba de la "gloria" copera, la que de Pascuas a Ramos disfrutan los modestos. Fue un croata, Mate Roskam, quien, con la transformación del último penalti en la decisiva tanda, permitió a la Cultural toparse luego con el FC Barcelona de Pep Guardiola. Tardaría seis años en volver a la competición del k.o. coincidiendo con el descenso a los infiernos de la Tercera. En su reencuentro, batacazo en el feudo del Laredo, a donde regresó un año después con Rubén de la Barrera al frente para reiniciar un camino que le colocó al Albacete Balompié como último obstáculo. Decidió Alex Gallar en la prórroga en otro instante que forma parte de la historia culturalista. 

El Real Madrid fue el último equipo de Primera en pisar el Reino de León. Volverá a ser uno de los cocos más deseados por la hinchada blanca, pero antes, el Lorca FC y solo el Lorca FC. La escuadra blanquiazul purga en la cuarta categoría nacional los desvaríos de sus gestores hasta bajar dos peldaños en un mismo verano. Tras el cambio de manos, la Copa es un escaparate, además de una solución para las "penurias".

Al "Artés Carrasco" acudirá este miércoles el cuadro leonés con todas sus armas, sin reservas, porque la Copa importa. Tanto importa que Aridane Santana forzó, por decisión técnica, la quinta tarjeta en liga para dosificar sus esfuerzos en otra semana de tres partidos. Víctor Cea apostó en las primeras eliminatorias ante el Navalcarnero y el Fuenlabrada por sus mejores hombres y ahora deberá volver a elegir cuando en los últimos desplazamientos ligueros fueron otros los que le echaron un capote. Y, de reojo, el encuentro del sábado en el José Zorrilla sin apenas tiempo de pensar en el Valladolid B. Es el momento de explotar la supuesta profundidad de plantilla.

En la sesión vespertina de este lunes comenzará la preparación del choque copero para el que, a priori, solo Vicente Romero está descartado. Al día siguiente comenzará el largo viaje, con parada en Albacete, donde pernoctará el equipo tras el partido y donde el jueves pretende llevar a cabo una sesión de recuperación y de preparación para el siguiente choque. Arranca una semana sin descanso a medio camino entre la ilusión y la obligación.