Por ellas, por todos
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Bilbao
El Programa de Cribado de Cáncer de Mama en Euskadi, desde su puesta en marcha en 1995 y hasta junio de este año, ha realizado casi 2,5 millones de citaciones y 2 millones de mamografías, posibilitando la detección de 9.290 cánceres, la mayoría en estadios precoces.
El consejero de Salud del Gobierno Vasco, Jon Darpón, ha dado a conocer estos datos en una rueda de prensa con ocasión de la celebración mañana del Día Mundial dedicado a esta enfermedad en la que han estado presentes representantes de las asociaciones de cáncer de mama de Álava (ASAMMA), Bizkaia (ACAMBI) y Gipuzkoa (Katxalin).
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En su intervención, Darpón ha reiterado el compromiso de Osakidetza, del Departamento de Salud y del Gobierno Vasco en su conjunto, con todas las mujeres que padecen cáncer de mama. Asimismo, ha transmitido su "gratitud y reconocimiento" a las asociaciones de mujeres afectadas por cáncer de mama, y a las familias, "auténtico soporte anímico de todas las mujeres que se enfrentan a la enfermedad".
A todas ellas les ha querido trasladar un mensaje de esperanza. "Por una parte, porque el impacto de la enfermedad en las mujeres se reduce gracias a la detección precoz y a la optimización en los tratamientos, que son cada vez más personalizados y por tanto más eficaces y con menos efectos secundarios, ofreciendo la mejor opción diagnóstico-terapéutica y facilitando la coordinación entre diferentes recursos asistenciales", ha explicado.
En este sentido, el consejero ha destacado que la supervivencia del cáncer de mama sigue aumentando en Euskadi, ya que a lo largo del periodo 2000-2012, la supervivencia para todas las mujeres con cáncer de mama ha crecido desde el 83,4% en el periodo 2000-2004 al 86% en 2010-2012.
Asimismo, ha subrayado que la supervivencia a cinco años del diagnóstico ha mejorado en todos los grupos de edad y, "de manera significativa", entre las mujeres de 50 a 69 años, precisamente la población diana del Programa de Detección Precoz de Cáncer de Mama de Osakidetza. En este segmento de edad, del 89,1 registrado en el periodo 2000-2004, se ha pasado a un 92,7% en 2010-2012.
Euskadi cuenta con un Programa de Detección Precoz de Cáncer de Mama que dispone en la actualidad de una unidad de gestión, once unidades de cribado, siete unidades de valoración y siete hospitales de referencia cuyos Comités de Mama establecen, en sesiones clínicas semanales, las pautas diagnostico-terapéuticas y el seguimiento de las lesiones sospechosas.
El consejero ha destacado el equipo de profesionales que forman parte de este servicio y su compromiso en la atención integral a todas las mujeres afectadas, y les ha felicitado por su "entrega y profesionalidad".
9.290 CÁNCERES DETECTADOS
Desde la puesta en marcha del programa, en 1995, y hasta junio de este año, se han realizado casi 2,5 millones de citaciones, prácticamente 2 millones de mamografías, posibilitando la detección de 9.290 cánceres, la mayoría en estadios precoces.
El consejero ha destacado que el 83,1% de las mujeres a las que se detectaron esos tumores recibió un tratamiento no invasivo de la mama. Desde el punto de vista cualitativo, el programa alcanza tasas de participación del 80% y como indica la encuesta realizada en los meses de febrero y marzo, las mujeres participantes muestran un grado de satisfacción en "parámetros de excelencia".
No obstante, ha defendido que los avances obtenidos no pueden ser excusa para relajarse, sino que deben ser un acicate para seguir progresando en el diagnóstico y tratamiento del que continúa siendo el tumor maligno más frecuente entre las mujeres en Euskadi y el que más fallecimientos produce por cáncer entre las mujeres.
Por esa razón, el consejero de Salud ha adelantado que, en el marco del Plan Oncológico de Euskadi 2018-2023, se va a seguir reforzando el programa de Detección Precoz de cáncer de mama, cuya población diana en la actualidad es de 325.984 mujeres y al que en 2017 se destinó en torno a 7,8 millones de euros.
Asimismo, ha destacado que su Departamento seguirá trabajando en la prevención, el diagnóstico y el tratamiento, y continuará con el modelo de atención multidisciplinar y avanzando también en la personalización del cribado y en el estudio de estrategias aplicables a mujeres de riesgo moderado.
