El Linares recupera sensaciones a domicilio

Linares

Con sufrimiento, pero tres puntos más para el Linares Deportivo. El encuentro frente al Huetor Tajar estuvo marcado por la igualdad de los dos equipos sobre el terreno de juego y, como se esperaba, las dimensiones del campo. El Miguel Moranto es un estadio siempre difícil para los visitantes, especialmente, para equipos que proponen fútbol como el conjunto linarense. En un campo tan pequeño es casi misión imposible tocar, hacer circular la pelota con fluidez y regalar al público posesiones largas. Sin embargo, los azulillos lo intentaron pese a que estaban condenados a adaptarse a ese fútbol de rechaces, segundas jugadas y ocasiones de la nada que suelen darse en condiciones similares.

Los locales pusieron a prueba al portero Lopito en varias oportunidades, igual que el equipo de Juan Arsenal en meta contraria. Sin embargo, no fue hasta el 88' cuando se desniveló el resultado en el marcador gracias a una acción brillante de Dani Espejo que, desde fuera del área, disparó un auténtico "misil" que acabó por colarse en la portería de Juanfran Rico. Después de esto le bastó con mantener la concentración y la intensidad para arrancar, por fin, tres puntos en un estadio incómodo para los azulillos. Destacaron, además del guardameta del Linares, jugadores como Anaba, Josema o Pedro Beda. En el caso de los creadores y aunque no era el mejor escenario para ellos, cabe también poner en valor el gran partido de Barba y, una vez más, Pablo Ortíz.