Sindicatos y patronal dan un paso más en pro del sector vitivinícola

Aranda de Duero

Los sindicatos disponen ya de un borrador del documento en el que llevan trabajando con la patronal para fijar unas condiciones laborales y sociales dignas para el sector vitivinícola. La sede de UGT acogía este martes la reunión que habían fijado ya para esta fecha en vísperas de esta última vendimia, que a pesar de las perspectivas de masificación con las que venía, ambas partes han coincidido en señalar que se ha desarrollado mayoritariamente en condiciones razonables.

Con el objetivo final de fijar riqueza, este trabajo va encaminado a establecer, no sólo las condiciones meramente salariales, sino también cuidar de otros aspectos, como es la atención médica o de los hijos que viajan con los temporeros, que llegan de forma masiva durante esta época. “Porque es mucha gente que llega de golpe y hay que atender todas las circunstancias que tienen, si traen niños o la falta de médicos, es gente que tiene dificultades con el idioma y en todo eso es en lo que vamos a trabajar, para que el documento, aparte de práctico, sea novedoso y recoja todas estas cosas” explica Ángel Citores, secretario provincial de CCOO.

Sobre este borrador, ahora la patronal tendrá que hacer su contrapropuesta. El vicesecretario de FAE asegura que su pretensión es ser ambiciosos y que este trabajo no se circunscriba solamente al ámbito de los temporeros, sino a las labores en el viñedo durante el resto del año. “Queremos que a medio plazo este sea un sector que genere empleo de calidad, que sirva para fijar población, porque si nos quedáramos solamente en los temporeros, es un período de tiempo muy corto”, apunta Íñigo Llarena.

Sindicatos y patronal han quedado en volver a reunirse a principios del año que viene, con el propósito de intentar culminar este trabajo hacia el mes de marzo. Pablo Dionisio, secretario provincial de UGT, confía en que ambas partes puedan tener el documento cerrado para esas fechas, aunque también tendrán algo que decir después las administraciones públicas. “El tema de las administraciones es algo que tenemos que hablar, que presionar, tenemos que hacer primero nuestro trabajo y luego llegar al convencimiento de la otra parte”, explica el sindicalista burgalés.

Las dos partes han coincidido también en la necesidad de que esta negociación incluya un apartado para luchar contra el fraude en las contrataciones que se produce por parte de intermediarios, que aunque son minoritarios, son bien conocidos en la Ribera y suponen una competencia desleal para las empresas que actúan legalmente y un borrón en el prestigio de esta marca de calidad. “Suelen ser empresas multiservicios, montadas en un móvil, localizadas y que todo el mundo en la Ribera sabe quiénes son y cómo se llaman y suponen una competencia desleal hacia las empresas que lo hacen bien y, por lo tanto, hay que poner límite”, concluye Ángel Citores.