Aguas de Lorca tendrá su sede en el edificio de la antigua Comisaría

Lorca

El Consejo de Administración de la empresa mixta Aguas de Lorca, participada por el Ayuntamiento e Hidrogea, ha aprobado este miércoles acometer la demolición del edificio de la antigua comisaría del Cuerpo Nacional de Policía, en la Calle Lope Gisbert, donde proyecta construir un nuevo edificio de cinco plantas para su sede y otros usos públicos.

La planta baja se reservaría para los servicios de atenció al público de Aguas de Lorca y se creará una ludoteca. En las dos primeras plantas estarán las oficinas y dependencias administrativas. La planta tercera y cuarta se convertirá en la nueva sede de la Universidad Popular y el ático se empleará como espacio multiusos para eventos culturales y sociales.

Las obras ascienden a un importe estimado de 3,5 millones de euros que llegarán a 4,5 contando con el equipamiento del nuevo edificio, según ha explicado el alcalde de Lorca, Fulgencio Gil, que ha dicho que en primer lugar se va a proceder a la demolición del edificio y, "de forma inmediata, se procederá a su contratación por medio de procedimiento público".

El calendario con el que trabaja la empresa mixta marca el primer trimestre del próximo año para la contratación de los trabajos, cuyo plazo de ejecución irá de 18 a 24 meses. Aguas de Lorca podría ahorrarse así los 80.000 euros que paga al año en concepto de alquileres.

Esto, además, supondría también una reestructuración y mejora de los accesos al aparcamiento público de la Plaza de San Vicente. Con el traslado de la Universidad Popular, en su actual sede se crearía un "espacio joven", donde tendrá su sede el Consejo de la Juventud y se acondicionará una sala de estudio.