"Mi abuelo merecía que contara su historia"

Granada

Se limitó a decir "ese es mi amigo". Acababa de aparecer en televisión el poeta Luis Rosales y Manuel Bonilla se sumió en sus pensamientos. Estaban en silencio, a media luz, como tantos otros días. Al cabo, sentenció una frase a modo de lamento: "Yo pude salvar a Lorca".

Víctor Amela tenía 10 años cuando su abuelo le dio el título de la novela que acaba de publicar y a la que ha dedicado varios años de investitación. En ella relata como su abuelo, nacido en Torvizcón, colaboraba de estraperlo en pasar del bando nacional a republicanos que corrían peligro a través de los senderos y escodrijos de Las Alpujarras que sólo el conocía.

El escritor barcelonés cuenta cómo la familia Rosales, al frente entonces de la Falange Española en Granada, barajó la posiblidad de procurar a Federico una fuga a zona republicana cuando la situación empezaba a no estar bajo control y con Federico escondido en su propio domicilio. Bonilla era el enlace.

Esta es la historia  también de su abuelo Manuel, que acabó establenciéndose en Barcelona como esparcido por la detonación que para España supuso la cruenta, injusta y dolorosa Guerra Civil.

Durante décadas la frase "Yo Pude Salvar a Lorca" martilleó la sien de Amela, que ahora rinde así homenaje a su abuelo Manuel Bonilla, de quien conoció su verdadera historia al viajar a Las Alpujarras en busca de su memoria.

"Mi abuelo merecía que contara su historia", dice el escritor durante la entrevista.

Escucha aquí la entrevista con Víctor Amela.