La juez acepta la petición de Trump de que un perito independiente revise los documentos incautados en el registro de su casa

Donald Trump no cesa en su ímpetu por desacreditar instituciones tan prestigiosas como el FBI o el Departamento de Justicia de EEUU, y en esta ocasión ha obtenido cierto resultado, ya que Aileen Cannon, la magistrada encargada del caso que investiga al expresidente por haberse llevado documentos confidenciales y clasificados de La Casa Blanca, ha atendido a una solicitud suya que paraliza de forma temporal la investigación.

Cannon, que fue nombrada por la administración Trump durante su mandato, ha decidido aceptar la petición que habían realizado los abogados de Trump, en la que solicitaban que un "maestro especial" revise todos los documentos y demás material incautado por las autoridades durante el registro de la casa de Mar-a-lago del expresidente.

Tanto es así, que la orden, publicada por The Guardian, asegura que el Departamento de Justicia debe detener la revisión del material confiscado "en espera de la resolución del proceso de revisión del maestro especial", en referencia al perito independiente.

La magistrada argumenta que "una orden judicial temporal para restringir el uso por parte del Gobierno de los materiales incautados con fines de investigación, pero no evaluación, es apropiado y equitativo con el objetivo de mantener el valor de la revisión por parte de un maestro especial".

Así, Cannon, ordenó que esa persona se encargue de revisar los bienes incautados, gestionar las afirmaciones de privilegio ejecutivo invocadas al respecto, hacer recomendaciones y evaluar las reclamaciones de devolución de bienes.

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En relación a quién será este responsable independiente, la juez ha pedido al Departamento de Justicia y al equipo de Trump que emitan una lista de candidatos a "maestros especiales" para este viernes, pero se desconoce qué perfil tendrá este perito.