Meryl Streep critica que los hombres no se identifiquen con personajes femeninos y pone un ejemplo muy claro: "Para una niña es fácil"

Madrid

La actriz y premio Princesa de las Artes, Meryl Streep, no solo ha dejado con la boca abierta a su público esta mañana bailando al ritmo de las gaitas en su llegada a Oviedo, sino que también ha dado de que hablar durante el acto ‘Sin guion. Encuentro con el público’ en el Palacio de Congresos de la ciudad asturiana.

La actriz ha hecho hincapié en uno de los comportamientos que ha observado en los hombres a lo largo de los años, su dificultad para identificarse con un personaje femenino, algo que por el contrario, a las chicas no les pasa, "para una niña es fácil identificarse con Peter Pan, porque una niña no se identifica con Wendy", ha aclarado al comienzo de su intervención.

La industria cinematográfica y la mujer siempre ha mantenido una relación basada en poder y sexismo y la actriz lo ha podido vivir a través de películas como 'El diablo viste de Prada', donde ella misma ha señalado como su personaje de Miranda Priestly fue el primero con el que los hombres "se sintieron identificados" a través de la "actitud" de "liderazgo" que refleja la "jefa" de Vogue.

Otro de los casos que Meryl Streep ha expuesto durante la conferencia para resaltar la magnitud del problema ha sido las películas protagonizadas e incluso dirigidas por mujeres como el reciente éxito de 'Barbie', con la que Greta Gerwig hizo una gran crítica al machismo normalizado en la sociedad y eso no agradó a su público masculino.

Ante la cantidad de preguntas, un asistente al evento preguntó a la actriz si también notó ese comportamiento con su papel de Margaret Thatcher en 'La dama de hierro', pero Streep ha confesando irónicamente que "realmente nadie quería identificarse con Margaret Thatcher", ya que en realidad la película trata sobre el envejecimiento.

La fama sigue "aterrorizando" a Meryl Streep

Meryl Streep también ha compartido con su público la dura relación que tuvo con la actuación ya que al principio, cuando era más joven, "pensaba que era más frívolo ser actriz", pero al ir creciendo entendió que "no era solo vanidad, que había algo más ahí", ha asegurado.

La actriz ha confesado que "la parte de celebridad y famoseo" es algo que todavía hoy le "aterroriza" y que en su momento nunca buscó y cuando llega "te desborda como un tsunami".