La insoportable ausencia de Nathan en 'Misfits'

Dicen que las segundas partes nunca fueron buenas. La mayoría de remakes y adaptaciones dan buena cuenta de ello. Aunque siempre hay algo peor: crear un nuevo personaje que intente sustituir al anterior protagonista. Así es la vida sin Nathan. Su pérdida y las nuevas tramas de este inicio de temporada convierten a la serie en una más. Pero sigue siendo 'Misfits' y nunca hay que dudar de su capacidad para sorprendernos. ATENCIÓN: Contiene espoilers. Más noticias de cine y series en la página web de 'La Script' | TWITTER | FACEBOOK

Un webisodio de 10 minutos. Esa fue la amarga y poco agradecida despedida de Nathan (Robert Sheehan) en 'Misfits'. La cadena británica E4 decidió no darle más protagonismo ni dramatismo. El descarado personaje anunció su marcha el pasado 11 de abril y ha puesto rumbo a Las Vegas-en la ficción- con Marnie y Nathan Jr. Allí seguirá, como siempre, metiéndose en problemas, y con su nuevo poder intentará hacerse rico en todos los casinos.

Mientras él se lo pasa en grande, todos sus seguidores se estarán tirando de los pelos. Nathan era el personaje redondo, el toque justo y excesivo, el contrapunto, la grosería y la irreverencia en persona. Una mezcla gore del Luisma y Fidel de 'Aída' y el cantante Mika. Sin escrúpulos, con corazoncito una veces, cruel y déspota en otras ocasiones. Nathan era como un imán, con su parte atrayente y repelente, con momentos de querer matarlo y veces en las aplaudirle. Esa era su magia. En 'Misfits' todo pilotaba en torno a Nathan y sus desvaríos.

La ficción de Howard Overman ha comenzado su tercera temporada floja, sin fuelle, centrada en las tramas personales. Y eso que, como ya es tradición, hay asesinatos de por medio. Los nuevos poderes de los protagonistas son a priori simplemente inútiles, dan pie a argumentos aún más absurdos y ralentizan la acción hasta aburrir. ¿A quién se le ha ocurrido convertir a Kelly en una científica? ¿Quieren mandarla a la NASA? ¿Hasta cuándo piensan que se pueden estirar las tramas de Curtis mujer y Curtis hombre? ¿Para qué sirve el nuevo poder de Alisha , si puede ver lo que alguien hace pero no detenerlo? Y lo más importante... ¿a qué esperan para darle a Simon el protagonismo que se merece? No hay mejor sustituto (en el caso de que haya que buscarlo) para Nathan que darle una vuelta de tuerca a la historia. Del expresivo, mordaz y extrovertido Nathan, al enigmático, silencioso y tímido Simon. Y volver a jugar con el imán.

Los creativos, por ahora, no han querido explotar esta opción y le han buscado un relevo a Nathan. Joseph Gilgun encarna a Rudy, un chico también problemático cuyo poder es desdoblarse en su otro yo, con dos visiones antagónicas, el Rudy sensiblón y el Rudy canalla. Solo se acerca a Nathan en su nivel de perversión. Sin gracia ni gancho, sus bromas molestan. Su única función, por ahora, ha sido ser el detonante para que estos inadaptados sociales vuelvan al centro de servicios comunitarios. Intenta ser el contrapunto y acaba siendo un burda (y ofensiva) imitación de Nathan.

Nadie le va a discutir a 'Misfits' que es la mejor serie estéticamente. Es una obra de arte visual. Pero sí la historia empieza a fallar, nada sirve. ¿Por qué explotar el lado humano de uno superhéroes? En las anteriores temporadas, había sido una consecuencia de esos poderes, pero no el centro de la acción. Curtis y Alisha siempre fueron personajes mediocres; Kelly, una macarra choni adorable, y Simon, el protagonista en la sombra. Nathan siempre estaba por medio, los imbuía en sus locuras y sacaba de ellos lo que son. Rudy ha pasado a ser un complemento más, al que parece que ni le prestan atención. No le ríen las gracias ni le desaprueban, solo van con ellos como un accesorio que de vez en cuando se desdobla.

'Misfits' no defraudará. Todas sus temporadas han combinado y dosificado la acción para terminar con un gran final. Y ya se avecinan pistolas y nazis en los próximos episodios. La tercera temporada contará con ocho capítulos y terminará el 18 de diciembre. Los chicos del mono naranja no llegarán a España de la mano de MTV hasta la primavera de 2012. Mientras retoma el vuelo, sigamos recordando a Nathan.