El caso del Severo Ochoa
Luis Montes Mieza y Miguel Ángel López Varas son investigados por la Consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid, a cargo de Manuel Lamela Fernández, a causa de dos denuncias anónimas en las que se les acusaba de sedaciones en dosis elevadas en enfermos terminales en el Servicio de Urgencias del Hospital Severo Ochoa. En enero de 2008, los tribunales cerraron el caso ratificando el sobreseimiento que ya en el mes de junio del año 2007 habían determinado, pero el doctor Montes Mieza ya había sido destituido en el puesto de coordinador a instancias de Lamela en 2005.
El 28 de enero de 2009 Luis Montes Mieza y Miguel Ángel López interpusieron una querella -admitida a trámite- por denuncia falsa y falsedad contra Manuel Lamela Fernández y los seis médicos firmantes del informe con el que se le pretendió inculpar -Isidro Álvarez Martín, de la Consejería de Sanidad; Hernán Cortés-Funes, del Hospital 12 de Octubre; Manuel Gómez Barón, del Hospital La Paz; Dolores Crespo Hervás, del Hospital Ramón y Cajal; Francisco López Timoneda, del Hospital Clínico de Madrid y Bartolomé Bonet Serra, del Hospital de Alcorcón-.3 En abril de 2011 la titular del Juzgado de Instrucción Número 43 de Madrid acordó el "sobreseimiento libre y el archivo" de la querella. Ese mismo mes se conoció la sentencia por la que se condenaba a Miguel Ángel Rodríguez, antiguo portavoz del gobierno de José María Aznar al pago de 30.000 euros como autor de un "delito continuado de injuria grave realizado con publicidad" contra Luis Montes Mieza. a día de hoy quedan demandas y querellas por resolver.