La mujer de rojo, icono de las protestas turcas
La secuencia de instantáneas de Osman Orsal se han convertido ya en un icono de las protestas.
Twitter y las demás redes sociales han adquirido una importancia vital en las revueltas de los últimos días en Turquía. Una secuencia de fotografías de estas revueltas se han convertido en símbolo gracias a su viralidad.
Osman Orsal es un fotógrafo de Reuters. Hace una semana, el día en el que empezaron las revueltas en Turquía, se fue a trabajar al Parque Gezi. Sacó un sinfín de fotos -como es lógico-; pero cuatro de ellas se han convertido ya en un icono de las protestas. Pero, cuando hemos visto ya tantísimas fotos de protestas, acampadas y manifestaciones...¿Qué tienen de especial para que hayan llamado la atención?
Más información
- Miles de turcos desafían de nuevo a Erdogan y toman las calles del país
- Los indignados turcos anuncian que continúan con la "resistencia"
- Erdogán vuelve esta noche a Turquía tras volver a arremeter contra los indignados del país
- Cientos de policías turcos entran en la plaza Taksim para reprimir las protestas ciudadanas
- Cientos de policías usan gas lacrimógeno para desalojar a los manifestantes de la plaza Taksim
- Turquía espera sin muchas expectativas la reunión de Erdogan con los manifestantes
- Erdogan ofrece hacer un referéndum sobre el parque de Estambul
- Erdogan advierte a los manifestantes de que su "paciencia" se agota
- El Gobierno turco cede y no seguirá adelante con las obras sobre el parque Gezi
En la secuencia de las fotos, aparece una mujer vestida de rojo recibiendo de frente un chorro de gas lacrimógeno de la policía. Está tan cerca y se la están rociando con tanta presión en la cara que en una de las fotos se le levanta hasta el pelo. En el resto de fotos, se ve cómo después el policía le sigue echando más gas aún.
Ayuda a que sea tan simbólico que no se distinga bien la edad de la mujer. No se le ve bien el rostro, el vestido tiene un aire como de otra época... así que no es posible precisar si es una estudiante, una mujer de mayor edad...
El fotógrafo cuenta en su blog que no volvió a ver a la mujer y que consiguió sacar la instantánea porque va siempre preparado para evitar los efectos del gas lacrimógeno a las manifestaciones: lleva manga larga, máscara antigás... porque después de los primeros tres o cuatro disparos es difícil aguantar haciendo fotos.
Las fotos se han hecho virales, hay todo tipo de montajes con ellas en Twitter y Facebook... lo habitual. Parece que, de momento, ha servido para llamar la atención sobre la situación de la mujer en Turquía y sobre la respuesta policial a los disturbios.
Todas las revueltas de los últimos años han tenido su foto o su vídeo con su personaje viral. En España, el Camarero del Bar Prado y Jill Love; en Grecia, el perro Lukanikos, la foto de la pareja que se estaba dando un beso en Vancuver... Al final, estas son las imágenes de las que nos acordamos cuando pensamos en lo que ha pasado, y cada vez eso lo deciden más las redes sociales y menos los medios.