Un teatro que se siente pero no se ve

Madrid

No es un teatro para ciegos, pero los espectadores que acudan a la sala Mayko de Madrid, sean invidentes o no, tendrán la misma información para disfrutar de la obra. No hay escenografía ni tampoco iluminación. Sólo está la voz de los actores, acompañada de efectos de sonido, para crear y envolver el ambiente. Según la productora de 'Dark Stage' (escenario oscuro, en inglés), May Fernández, "buscábamos hacer algo diferente, donde la palabra y la modulación de la voz tuvieran más peso. Lo llevamos un poco al terreno de las antiguas radionovelas, que a mí me gustaban mucho. Es trasladar eso, en alguna medida, a las tablas".

Durante algo menos de una hora, se suceden tres pequeñas obras: thriller, drama y comedia. Se ha buscado expresamente que ninguna de ellas fuese de terror, a pesar de que el hecho de ser representadas en la oscuridad invitaba a esa temática. Los dramaturgos que han escrito los textos son Ignasi Vidal, Zenón Recalde y Rosana Lorente. Esta última explica que "fue un reto. Me gustó mucho, pero fue difícil, incluso partiendo de la premisa de la temática abierta y de que la historia se desarrolle en la oscuridad, la trama tiene que estar justificada. De hecho, tuve que reescribir una idea que tenía porque me parecía que no funcionaba, porque había que pensar que el público no iba a estar viendo a los personajes y teníamos que crear algo potente".

Después de un casting al que se presentaron más de treinta actores y actrices, se eligió el reparto, formado por Alberto Viciana, Gonzalo Martín y Patricia Peñalver. Los tres son actores de doblaje y, Patricia, además, también es actriz de método. "Es otra forma de sentir el teatro", señala Patricia Peñalver. "El teatro ya no se tiene que quedar solo en verlo, sino en olerlo, en escucharlo, en salir con experiencias y reflexionar luego sobre ellas. Y que te aporte algo". En ese mismo sentido se expresa Alberto Viciana. "Es una experiencia muy distinta. No sólo te apoyas en tu voz e intentas convencer a la gente. Cuando una persona no tiene la vista y solo le queda el resto de sus sentidos, tiene que potenciar esos sentidos y saber interpretar la realidad solo con el oído o el olfato. En cierto modo es lo que los locutores tratan de hacer en la radio, pero en este caso con más proximidad, porque los actores están a tu lado".