Piruletas para los ciudadanos

Madrid

La famosa ceja de Zapatero, la niña de Rajoy, fueron tonterías, pero sus autores estaban muy ufanos porque creían que eran tonterías que funcionaban desde el punto de vista del impacto publicitario. La creencia de que una tontería que funciona deja de serlo inmediatamente es muy propia de políticos y de los especialistas en comunicación que les rodean. En ella ha caído también Pablo Iglesias, con su “tic-tac, tic-tac”, repetido hasta la saciedad, como si fuera un hallazgo y no la pesada constatación de que Iglesias, como otros políticos antes que él, empieza a correr el riesgo de creer que los ciudadanos son niños a los que le encantan las piruletas.

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Antes que lanzarse a hacer chistes, algo poco aconsejable a quienes pretenden desempeñar responsabilidades públicas, como llamar “Pantuflo” a uno de sus contertulios en televisión, Iglesias podría haber visto el magnífico video que circula por la web y en el que un entrevistado, sin perder un minuto la compostura ni la capacidad pedagógica, da una paliza dialéctica monumental a dos periodistas de la CNN. El entrevistado, que se llama Reza Aslan, pone en ridículo a los dos reporteros precisamente porque no se permite ni una broma ni un chiste.

En fin, es una pena que el debate político se vaya a desarrollar en estos términos porque en política no todo es basura: hay muchos ejemplos de lemas electorales que son realmente atractivos o inspiradores. Lo fue, por ejemplo, el eslogan electoral de la primera campaña exitosa del brasileño Lula: “La esperanza vencerá al miedo”, decía.