Reciclado de electrodomésticos: ¿Otro fraude?

Hace algunos años escribía un post sobre las sospechas sobre el reciclado de electrodomésticos y, por lo tanto, de que se necesitaban muchas aclaraciones para saber si el reciclaje, por el que pagamos los usuarios, llegaba o no a buen puerto: vamos, si se hace o no.

Ahora es el Consejo de Estado el que acaba de denunciar en un informe “fraude” en el reciclado de electrodomésticos: los empresarios sólo dedican el 21% del dinero que cobran para ello para tratar los residuos de las lavadoras, los lavavajillas y otros electrodomésticos Y lo que es peor, dos terceras partes de estos aparatos contaminantes acaban en chatarreros incontrolados que hacen su “agosto” con la chatarra pero que para nada extraen los peligrosos gases que llevan. Es decir, que podrían estar “guardándose” unos 200 millones anuales.

Las estructuras montadas hace unos diez años para que todos estos peligrosos residuos tecnológicos llegaran a puntos limpios y plantas de tratamiento con personal y maquinaria adecuada, solo hacen una mínima parte mínima del trabajo. Hasta muchos transportistas, que son lo que nos recogen en las casas los viejos aparatos cuando compramos nuevos, hacen su negocio derivando estos al mercado negro sin que el consumidor lo sepa y mientras los establecimientos miran para otro lado...

Bruselas lleva años presionando a España para acabar con este “agujero” medioambiental y económico ( estamos a la cola de los países con menor cuota de recogida de estos residuos ) y por eso el Gobierno puso en marcha recientemente un nuevo Reglamento para dar más transparencia al proceso, implantando un código para cada residuo que, en teoría, rastreará dónde va cada electrodoméstico. ¿Suficiente para evitar el fraude?

Mientras se espera para ver si es una buena o mala solución, el sector del reciclado de electrodomésticos y lo propios fabricantes e importadores, como muchos comercios que toleran el “mangoneo”, deben dar todas las explicaciones del mundo. Y probablemente devolver mucho dinero. Si lo que pagamos los usuarios por reciclar no se está destinando para reciclar, a los fines para los que fue concebido este canon, que me devuelvan mi dinero, como dije hace unos años: el de la lavadora, del frigrorífico o el lavavajillas que he cambiado en los últimos cinco años.

Yo no seré el mejor ejemplo de reciclador, pero reciclo cartón, envases, vidrio y también creía estar ayudando al reciclado de electrodomésticos para no dañar la capa de ozono. Pero si es para engordar los bolsillos de algunos, que me borren ya.