Fidelización: Los “cuernos” en las compras están de moda

Madrid

Las marcas están en guerra. Con las “otras”, pero también con sus clientes. Pero para ganárselos a toda costa. Para atraerlos para siempre y para evitar que se vayan con la competencia. Por eso 7 de cada 10 consumidores participan en programas de fidelización, según un estudio de TNS. Y por eso 3 de cada 10 compras de una marca se deben a un programa de fidelización. De ahí que los programas de fidelización estén creciendo en nuestro país cada año.

Con pequeños detalles, casi siempre económicos y alentados por la crisis, aliñados con otras ventajas, atención personalizada, avisos de ofertas, compras en exclusiva con precios rebajados días antes que los demás, etc, el cliente se siente “querido” por la marca, le hace más grata la compra y, fundamentalmente, piensa menos en el “otro” o la “otra”.

En España esta fórmula ha crecido nada menos que un 16% en 2014 con respecto al año anterior. Y tiene claros ganadores: Carrefour estaciones de servicio, Cepsa, Bodybell, Alcampo estaciones de servicio, Meliá y BP. Es decir, un perfil muy económico, en el que ganan claramente los fieles a los descuentos en las gasolinas o el dinero que les reporta directamente en las compras de los hipermercados o en regalos exclusivos. Los vales-descuento tienen tirón.

Claro que, en contra de lo que suele ocurrir, aquí, como en casi todos los actos de compra, la sartén la tenemos los consumidores: decidimos si somos fieles o infieles. Y si es verdad que una gran mayoría estamos de una u otra manera “fidelizados”, ojo: casi con la misma facilidad declaramos que si “el otro” nos ofrece algo mejor, nos iríamos. Y el porcentaje de quienes piensan así también ha subido en el último año. Es decir, un plan de fidelización más ventajoso para nuestro bolsillo y allá que nos vamos…

Y ésa en nuestra mejor herramienta: saber que en todo momento podemos y, sobre todo, debemos cambiar. Medio punto menos en el precio de la gasolina, que nos abonen 50 céntimos o un euro más en el siguiente pago en gasolina o la compra, unas rebajas anticipadas más generosas o descuentos especiales en las compras en alguno productos son suficientes para que nos vayamos.

Está claro que se han acabado los tiempos de llenar el carrito en la misma tienda, súper o hipermercado, estar siempre con el mismo operador de telefonía, de guardar siempre el dinero en el mismo banco o caja, mantener toda la vida el mismo seguro de coche o del hogar o estar con la misma compañía eléctrica, repostar en la misma marca... Los “cuernos” están de moda en las compras. Y si encima nos los “subvencionan”, mejor que mejor.