“No es aceptable que decidan que, si no se hace una ley para ellos, paran la Liga”

Madrid

Hasta ahora, la ley de 1996 permitía a los clubes pagar el 15% de la ficha de los futbolistas como derechos de imagen y de esta forma pagan muchos menos impuestos que si se considera salario, pero el nuevo enfoque de la Agencia Tributaria de esa ley ha puesto a la Asociación de Futbolistas Españoles (AFE) en pie de guerra: amenazan con convocar una huelga a partir del 17 de mayo si no se mantienen sus condiciones. Como inspector de Hacienda, Francisco de la Torre defiende que esta nueva interpretación de la ley no hace otra cosa que exigirles “unos requisitos que ya estaban para todos los contribuyentes” y les anima a recurrir y que sean los tribunales quienes decidan: “En determinados casos pueden tener razón, lo que no parece aceptable es que decidan que, si no se hacen una ley para ellos, paran la Liga”, sentencia.

De la Torre recuerda que la historia de las inspecciones a los futbolistas y a los clubs “está llena de actas millonarias que son las que ha originado las deudas del fútbol de los clubs que han pedido luego aplazamiento por los intentos -muy frecuentes- de intentar pagar menos porque, efectivamente, como tienen elevadísimos rendimiento de trabajo son de la gente que más impuestos pagan en este país”.

Además de los impuestos por derechos de imagen, los futbolistas tienen otra reivindicación: que sean los clubes y no ellos quienes tengan que pagar el sueldo de los agentes. “Si el jugador le paga directamente tiene que pagarle con sus rendimiento después de impuestos y no se puede reducir el gasto porque límite de gastos está perfectamente tasado”, explica el inspector. El problema reside en que el agente trabaja para el jugador y no para el club y es el jugador quien tiene que pagarle por eso, Francisco de la Torre vuelve a remitir a los tribunales: “Como cualquier contribuyente pueden recurrir pero apliquemos las mismas leyes a todo el mundo”.

Este trabajador de la Agencia Tributaria afirma que la presión fiscal a la que se somete a los jugadores “es la misma que tendría cualquier español que obtuviese esos ingresos, lo que ocurre es que la gran mayoría de los españoles no obtiene esos ingresos”. Y recuerda que “no existe un derecho incondicional a aplicar el tipo más favorable de sociedades y tampoco a deducirse todo tipo de gastos en esta sociedad” sin tener ningún tipo de contrapartida.