Menos lobos, que ya vendrá el tío Paco

Madrid

Acusábamos de prepotentes a las cúpulas de los viejos partidos, pero resulta que también padecen del mismo mal estos pimpollos que nos han surgido desde la nada y que ahora, dicen ellos mismos, van a hacer tragar el polvo al viejo cowboy, cual si estuviéramos en una película del oeste de Clint Eastwood.

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Hace nada que asomaron y ya traen en demasiadas ocasiones modos un punto soberbios y arrogantes. Ahora, precisamente ahora, cuando todo hace indicar que los partidos tradicionales, que no son dos, PP y PSOE, como afirman los desconocedores de la historia reciente de España, sino muchos más –recuerden: Izquierda Unida, Convergencia, PNV, Esquerra, BNG, entre otros- van a tener que emular a los contorsionistas, resulta que los más jóvenes llegan amenazantes.

“Ciudadanos no sólo tendrá la llave, tendrá el timón”, se ha permitido decir Albert Rivera, mientras Pablo Iglesias repetía la figura con esta otra frase: “Quien quiera entenderse con Podemos tendrá que dar un giro de 180 grados”. O sea, el trágala, tú servilón, tan poco democrático. Porque las mayorías lo son, recuérdenlo Iglesias y Rivera, no porque una luz divina se haya posado sobre las cabezas de los candidatos de PP o PSOE, sino porque han tenido más votos de esa ciudadanía a la que tanto apelan.

Menos humos, que ya llegará el momento de contabilizar cuántos sapos se van a tragar.