Michael Caine reclama el premio que le debe Cannes

A sus 82 años, Michael Caine ha barrido de un plumazo a los actores que figuraban hasta ahora como favoritos. Su papel de un director de orquesta apático ante la inminencia de la muerte en Youth le ha convertido en la sensación del día dentro y fuera de la pantalla: “Vine a Cannes hace 50 años con Alfie, la película se llevó premio pero yo no. Así que nunca volví. Pero esta vez es distinto, adoro esta película y no me importa nada si gano premio o no. Paolo es uno directores más grandes del mundo. Ya he visto Youth y puedo decir que el reparto entero está maravilloso. Sugiero que nos den un premio colectivo”.

Caine lo ha dicho entre risas ante un auditorio de periodistas de todo el mundo que ha aplaudido su sugerencia. Harvey Keitel, Rachel Weisz, Paul Dano y Jane Fonda (en un papel minúsculo pero muy jugoso) forman parte de este reparto de jóvenes y viejos perdidos en el tiempo. Sorrentino ambienta su historia en un balneario suizo, que utiliza como escenario onírico en el que trenza humor, música y los miedos vitales de personajes poéticos y patéticos como un trasunto de Maradona o una Miss Universo que llena de melancolía a los ancianos.

Youth es un brillantísimo ejercicio visual y emocional, al que Caine aporta una hondura extraordinaria. Pero su colmillo retorcido fuera de la pantalla ha proporcionado otro de los grandes momentos del festival. Con sorda y rapidez mental, Caine despachaba temas sobre la ancianidad y los personajes que le ofrecen ahora: “A mi edad tienes dos alternativas. O interpretas viejos o muertos. Yo elijo a los viejos”. También ha contado anécdotas sobre sus encuentros con la reina de Inglaterra: “Es una mujer de pocas palabras. Cuando me nombró caballero me comentó que yo había trabajado muchos años en el mismo oficio. Me dieron ganas de responderle que a ella le había pasado lo mismo, pero no quise que me quitaran el título de Sir y acabar decapitado en la torre de Londres”.

A su lado, Jane Fonda parecía un poco molesta por el éxito y la simpatía del actor británico. Ella, que interpreta a una patética actriz de Hollywood, se limitó a decir que está de acuerdo con el mensaje de la película y que ser joven es una actitud.

La otra película del concurso de la sección oficial ha sido Mountains May Depart del director chino Jia Zhang-Ke, que narra la historia de una familia a lo largo de 30 años y que ha resultado una tremenda decepción. El talento director de Un toque de violencia es irreconocible en esta cinta.