Eso, eso, reflexionen, que hay mucho que pensar

Ya se sabe que mañana es día de reflexión, y seguramente nos vendrá muy bien a todos dedicar buena parte del sábado a tan sano ejercicio.

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Aquella repulsiva frase de “todos los políticos son iguales”, de lo que automáticamente se desprendía que daba igual votar a uno que a otra, siempre ha sido una repugnante engañifa, una mentira malintencionada. Y este domingo, 24 de mayo de 2015, aún es más falso, una vez que se ha abierto el abanico.

Como es obvio, están en su derecho de votar a quién se les antoje, como han hecho hasta ahora, por cierto, porque ustedes, recuérdenlo, podían votar a Izquierda Unida, un suponer, y si no ganaba era porque, así es la democracia, el PP o el PSOE obtenían más votos.

Piensen ustedes, por ejemplo, si quieren favorecer a partidos que siempre circulan en dirección contraria pero acusan de locos a los miles de automovilistas que lo hacen en la dirección correcta. Protestan porque se forman alianzas contra ellos, sin querer analizar el porqué del rechazo. Ocurre, simplemente, que la oposición en bloque ha denunciado la ley mordaza porque es una ley fascista. Y en Madrid, por ejemplo, PSOE, IU, UPyD, Podemos, Ahora Madrid y Ciudadanos han firmado un Pacto contra el Hambre. ¿Ausente? El PP. ¿Por qué será que nadie ansía gobernar con Esperanza Aguirre?

Eso, eso, reflexionen, reflexionen.