"Es un delito contra la intimidad"

En Jaén ha sido un joven por instalar una aplicación espía en el teléfono de su pareja con la que controlaba sus mensajes y conversaciones. Este programa le permitía acceder a las conversaciones de whatsapp, todas las redes sociales a las que la víctima estaba inscrita incluso activar el micrófono o la cámara de forma remota para escuchar y ver lo que ocurría alrededor del teléfono. Según la Comisaría Provincial, la investigación se inició a raíz de la denuncia de la víctima que, tras nueve meses de relación, se personó en dependencias policiales con sospechas de que su pareja le estaba controlando porque no le parecía "normal" que él supiera el lugar y determinadas situaciones que le sucedían.

Ricard Martínez, Doctor en derecho constitucional y presidente de la Asociación Profesional Española de Privacidad asegura que es un caso claro de delito que recoge  el Artículo del 197 del Código Penal que castiga "las conductas para quien adquiera para su uso un programa informático concebido y adaptado para cometer estos delitos contra la intimidad" . Para el jurista  "lo más probable es que los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad hayan retenido el móvil como prueba y lo hayan puesto a disposición judicial. Es el núcleo mas intenso de nuestra vida privada como es el secreto de las comunicaciones o un espacio de intimidad que pueda llegar a ser un teléfono móvil".

Y añade Martínez que ejercer un control de esta manera sobre otra persona roza un caso de "acoso de libro".