El refugio español

Dar un paso más allá de las fronteras de su propio país es lo que han hecho ya más de 60 millones de personas a las que se les considera refugiados en el mundo. Guerras, conflictos religiosos o choques culturales entre la tradición y la evolución son algunos de los motivos por los que muchas personas se ven obligadas a huir de su país.

Según los datos del Ministerio del Interior, 5.947 personas solicitaron asilo en España durante 2014. De estas, a algo menos de la mitad, al cuarenta y cuatro por ciento, se les concedió: 2.749 son ahora ciudadanos de pleno derecho. Siria es el país que lidera las concesiones desde hace ya tres años que según CEAR, la Comisión de Ayuda al Refugiado, se debe a las facilidades que a nivel internacional se han dispensado para la tramitación y la obtención de información de los afectados.

Sin embargo, y a pesar de que la media de tramitación del expediente es de un año, tanto en positivo como en negativo, existen casos en España que se acumulan con un retraso de hasta tres o cuatro años porque no existe un límite definido de respuesta. Todo depende de la facilidad para obtener información de la situación del afectado desde el país de origen y la documentación proporcionada que justifique su asilo.

Mónica López es la responsable de acogida de CEAR, una de las organizaciones que dedica su atención a las personas recién llegadas al país y que pretenden acogerse al asilo. La función principal de colectivos como estos es el de “tratar de mantener los derechos de los refugiados” en trámite hasta que se resuelva su expediente, proporcionándole atención psicológica, atención social y orientación laboral y educación para aquellos que lo necesiten, además de sanidad gratuita. Eso sí, de entre todos sus objetivos, es el del asesoramiento jurídico sobre el que más hincapié se hace, “porque los solicitantes deben estar atendidos y bien orientados” hacia la resolución de sus trámites.

Según los datos proporcionados por el Ministerio del Interior, desde 2012 se han incrementado las peticiones de asilo hasta alcanzar la cifra de 2014. La tendencia era descendente desde 2007 cuando se registró un pico de peticiones de 7664 personas.