Ante nosotros, lo desconocido

Madrid

La actitud europea en torno a la acogida de refugiados ha cambiado en tiempo récord de forma espectacular. Escuchar lo que decían anteayer o lo que dicen hoy los líderes europeos, desde Merkel hasta Rajoy, es puro dadaísmo. También las sociedades han cambiado y abren ahora sus brazos de forma admirable.

Todo es modélico, pero nadie debe engañarse, porque todos temen, tememos, que en cuanto llegue la siguiente ola, que llegará, el espíritu cívico puede pasar de cuarto creciente a cuarto menguante; Dinamarca ya se opone hoy mismo.

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No obstante, creo que Europa, los gobiernos y los ciudadanos, estamos intuyendo que esto va en serio, que algo muy profundo nos desafía. La consciencia de que este oleaje es mar de fondo se extiende por Europa, para empezar por Alemania. El semanario Die Zeit lo expresaba el viernes pasado con rotundidad: estamos en un momento histórico que va a modificar a Alemania más profundamente que la reunificación, escribía. Y titulaba su reflexión editorial de forma dramática: "Ante nosotros, lo desconocido". ¿Es así? ¿Estamos ante un cambio de mentalidad o es un simple espasmo?