El padre literario de James Bond

Ian Fleming nació el 28 de mayo de 1908 en Mayfair, un barrio exclusivo de Londres. Poco antes de que estallase la II Guerra Mundial comenzó a trabajar en el departamento de inteligencia naval británico y participó en algunas misiones. Cuando se retiró, una vez acabada la guerra, empezó a escribir las aventuras de un agente secreto como un pasatiempo estival. Bautizó a su héroe con el nombre de James Bond porque uno de los libros que tenía en su casa de Jamaica era un tratado de las aves de las indias occidentales escrito por un ornitólogo llamado así, James Bond.

El primer libro de la serie Bond, “Casino Royal”, salió a la venta en la primavera de 1953. Tuvo una tirada de menos de 5 mil ejemplares y pasó prácticamente desapercibido. La segunda, “Vive y deja morir”, recibió en cambio una excelente acogida acompañado de un buen nivel de ventas. Desde entonces Ian Fleming escribió una novela al año. “Moonraker”, “Diamantes para la eternidad”, “Desde Rusia con amor”… Así hasta un total de doce, a los que hay que sumar nueve relatos más.

Pero las novelas de James Bond no fueron su único trabajo literario. Escribió un libro infantil que también fue llevado al cine: "Chitty Chitty Bang Bang", la historia de un coche volador. 

Murió el 12 de agosto de 1964 por una crisis cardíaca. Tenía cincuenta y seis años. Ni él mismo podía imaginar que el personaje que creara, basándose lejanamente en sí mismo, acabaría convirtiéndose en uno de los personajes cinematográficos más famosos de toda la historia del cine.

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