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Economia y negocios

Banca: más despidos, más servicios deficientes, más comisiones irregulares

La atención personal que se está olvidando en los bancos. / GETTY

Madrid

La banca ha comenzado a cerrar el año y ya sabemos algo: se van a la calle unos 9.000 empleados. Si los unimos a los alrededor de 70.000 que se han ido a la calle desde 2008, tenemos la friolera de 80.000. ¿Terminó la sangría? No. En los tres próximos años se espera la destrucción de otros 20.000, lo que redondeará la nefasta cifra de los 100.000. Seguramente, más. Exactamente el doble o incluso más de lo que se esperaba en 2008, cuando la banca, “agobiada” por la crisis, dijo que se deberían apretar el cinturón.

Lo contaba el otro día en un twit: hace algunos años, cuando los bancos comenzaron a ponerse en manos de las tecnologías, las máquinas, los cajeros y, fundamentalmente, todo tipo de operaciones a través de internet, - eso si, sin renunciar a los gigantescos sueldos, jubilaciones y todo tipo de beneficios - un empleado de mi caja me dijo que esas operaciones que hacíamos alrededor de una mesa cada inicio de mes: traspasos, ingresos, transferencias, etc, debería hacerlas yo en mi casa o la oficina. Lo que ahora es sencillo, entonces resultaba un poco engorroso y, desde luego, más incómodo que el que te lo hicieran. Pero la jugada estaba clara: retirar gente de las oficinas, menos trabajo, menos empleados, quitarse las menos “eficientes”. Y así se lo hice ver.

- En unos años, muchos de vosotros estaréis en la calle. Lo veréis.

- No, te equivocas, me dijeron. Ahora quieren que nos dediquemos a dar mejor atención al cliente.

En mi oficina había entonces unos 7-8 empleados. Ahora son 4. La atención es la misma de entonces y el panorama no es muy bueno para los que quedan pues hasta algunos de los servicios de “atención” ya los están centralizando en expertos que, a través del teléfono o internet, otra vez las nuevas tecnologías, no en tu oficina, cara a cara, abarcan a muchos más potenciales clientes.

Y en esa tesitura ya no hablas con la franqueza que lo haces con alguien a quien conoces, que sabe de tus “movimientos”, tus posibilidades económicas, tus preferencias…Vamos, que para hablar con máquinas y desconocidos, la “fidelidad” pasa a un segundo plano….

En este nuevo cambio de rumbo están los más de 20.000 que en los dos o tres próximos años se irán, tristemente, a la cola del paro o serán prejubilados en el mejor de los casos.

Rescates aparte, gestiones vergonzantes en algunas cajas, ¿qué hemos ganado en general los consumidores con la banca en los último años de la trituradora de la crisis? Muy fácil: nada. Peor servicio en general, limitaciones en los horarios a la hora de hacer determinadas operaciones a personas – mayores – que no se manejan en la red -, hemos pasado de hacer gestiones con personas a hablar “amistosamente” con una máquina, cierre de no pocas oficinas causando graves perjuicios a los clientes… Y ahí están los numerosos escándalos que han salpicado a bancos y cajas en los últimos años, con productos que han dejado tocada gravemente su maltrecha credibilidad por décadas: preferentes, hipotecas suelo, desahucios vergonzosos. Una banca con más tecnologías, pero sin corazón.

Todo ello a cambio, encima, de más y más comisiones. Y lo que es peor, cada vez más caras, que ha disparado nuestros gastos en este concepto en los últimos años. El último informe sobre reclamaciones del Banco de España es claro y vuelve a sacarles los colores y poner en entredicho sus supuestas “buenas prácticas”: que cobren por el ingreso en efectivo – por lo que te clavan hasta 3 euros – y el “palo” que te dan por quedarte en números rojos, que oscila entre los 39 y los 25 euros, con serias dudas de que no estén atropellando también en este terreno a sus clientes. Por ejemplo, con dudas razonables de lo métodos para comunicarte que te has quedado sin saldo. ¿Quizá porque cada día en descubierto cuesta un dineral? Vamos, tasas excesivas, quizá irregulares, quien sabe si ilegales, que, sin embargo, nadie parece querer atajar. Muchos “amagos” oficiales y del BE para acabar con la situación, pero que ya nadie se cree.

La banca siempre gana. Tú pierdes, pero ahí están sus cuentas de resultados…Es lo único que vale.

 
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