Pau Donés: “Me voy a curar, no quiero dejar sola a mi hija”

Barcelona

Todo comenzó con unas molestias en el estómago y cuando se quiso dar cuenta estaba en un hospital sometiéndose a una operación contra el cáncer de colón. Lo contaba hace tres meses en un vídeo, no exento de humor, desde el mismo centro en el que era tratado. Ahora Pau Donés regresa a los escenarios por una causa benéfica, recaudar fondo el estudio del oncogén BRAF, que vienen de la mano de un disco-dvd para calmar la ansiedad de los fans que se perdieron los conciertos debido a la cancelación de la gira. Esta mañana el cantante de Jarabe de Palo ha explicado en Hoy por hoy con Gemma Nierga como está siendo su lucha contra el cáncer y ha detallado sus planes de futuro.

“Estoy enfermo cinco minutos al día: cuando me levanto y recuerdo que tengo que estar relajado. Después empiezo a vivir la vida”. Pau Donés, hiperactivo y optimista por naturaleza no puede parar quieto. Y por supuesto, un cáncer de cáncer no iba a cambiar eso. Desde que hace 3 meses le diagnosticaron y fue operado de un cáncer de colón, el cantante de Jarabe de Palo se ha puso en marcha para intentar normalizar el hecho de vivir con este enfermedad. “Por eso le di una notoriedad” explica Donés “porque quiere quitarle el estigma”. Es un granito más en la lucha contra una dolencia que, como él mismo dice “no estamos en el momento del titular ‘Cáncer igual a muerte’ pero tampoco estamos en el momento en que deje de ser titular”.

“La garrapata”, como llama Pau Donés a su cáncer, está extirpada, pero no está curado del todo. “En medio año voy a hacer la vida que hacía antes pero tengo un que oncogén que llama BRAF y eso lo que hace es que en algún momento de mi vida vuelva el cáncer” explica el músico catalán. “Eso puede ser o puede no ser. El futuro no existe, tengo las mismas posibilidades de vivir un día como cuarenta años”. Pero eso no es fácil de asimilar para las personas cercanas “por eso mi obsesión por explicar bien lo que significa tener cáncer”. Y con estos conciertos, el objetivo, además de recaudar fondos para investigación, es “crear un mensaje que provoque despreocupación en el entorno del enfermo”. En su caso, sobre todo en su hija. “Tiene 11 años y no quiero dejarla sola. Me voy a curar para estar vivo hasta que tenga una edad que no le haga falta un padre”.