El portal de Ferraz

Madrid

Creo que tardaremos en olvidar unas navidades tan contaminadas por el calendario político como estas que estamos viviendo. Y quizás por eso, por la coincidencia, chirrían todavía más algunas cosas que cuadran poco con el espíritu de paz y fraternidad que se le supone a estas fiestas. Y desde luego lo más destacado en este sentido es el espectáculo que vuelve a dar el Partido Socialista con su batalla interna por el poder. El pulso de Susana Díaz a Pedro Sánchez es ya descarnado; ayer dijo el secretario general que él fija las líneas políticas del partido; hoy le responde la presidenta –en una entrevista que mañana emitiremos aquí en la SER- hoy le responde que la línea de los pactos la fija el Comité Federal; Comité que se reúne el lunes con los tambores de guerra sonando ahora mismo a toda potencia. Y con alguna paradoja que no está de más subrayar.

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Por ejemplo, dos de los barones que más fuerte han gritado contra un hipotético acuerdo del PSOE con Podemos son presidentes...gracias a Podemos. Guillermo Fernández Vara en Extremadura y Emiliano García-Page en Castilla La Mancha, aquí incluso con un acuerdo de investidura firmado. Y en Andalucía no olvidemos que la propia Susana Díaz también lo intentó, aunque sin éxito. Así que no deja de resultar llamativa esa contradicción aunque ahora se invoque lo del referéndum de Catalunya que defiende Pablo Iglesias como gran anatema para no darle ni agua. No sé, ignoro por dónde tirará finalmente el PSOE ni quién ganará este pulso pero con estos espectáculos haber sacado 90 diputados el domingo casi parece un milagro.