Alex Txikon: "En el Nanga Parbat he vivido cosas muy bonitas pero ha faltado juego limpio"
El vasco explica en ‘El Larguero’ cómo ha sido su gesta de subir en invierno al Nanga Parbat
Goikoetxea: 'Estoy absolutamente convencido que Aduriz estará en la Eurocopa'
15:37
Compartir
El código iframe se ha copiado en el portapapeles
<iframe src="https://cadenaser.com/embed/audio/460/001RD010000004057734/" width="100%" height="360" frameborder="0" allowfullscreen></iframe>
Alex Txikon está a punto de volver a casa, aunque un retraso del avión impide que sea este lunes, y desde Estambul explica en ‘El Larguero’ cómo ha sido su gesta de subir en invierno al Nanga Parbat (8.126 metros). Lo ha hecho junto al italiano Simone Moro y el pakistaní Ali 'Sadpara'.
El Nanga Parbat era uno de los dos únicos 'ochomiles' -el otro es el K2 (8.611 metros)- que jamás se había escalado en invierno.
Txikon, con diez 'ochomiles' en su haber, ya tuvo que desistir el invierno pasado de lograr su cima cuando le quedaban unas tres horas para la cumbre y este año ha regresado para culminar el reto. “Hemos subido al Nanga Parbat de rebote”, cuenta el vasco desde un hotel de Estambul.
“Nuestra primera opción para hacer cima en invierno era el K2 pero no recibimos los permisos de China”, explica antes de sentenciar que esta cima es uno de sus retos. “Veo posible conseguir el K2, aunque es un proyecto totalmente diferente”, comenta.
"He perdido solo tres kilos, máximo cuatro; lo que más se pierde es volumen", explica. “La bajada fue complicada, en condiciones malas, y lo peor es que la noche estaba acechando”, dice también Txikon.
"En el Nanga Parbat he vivido cosas muy bonitas pero he sentido falta de juego limpio en el campo base porque siento que no éramos transparentes entre los equipos. Había cuatro expediciones diferentes y había la sensación de “si no subo yo no sube nadie”, explica el vasco.
Por último comenta el alpinista si se puede vivir del alpinismo. "Es muy complicado vivir del alpinismo; sobrevivo gracias a conferencias y trabajos puntuales que hago durante el año".
"Esta expedición hemos pasado de los 40.000 euros y hay cosas que las sacamos al trote, porque los patrocinadores nos dejan billetes de avión… Vivimos pues, no tengo coche, vivimos un poco de los amigos…”
"Siempre salimos perdiendo pero es que esto es un proyecto. Hemos sobrepasado los 200.000 euros en estas cinco expediciones invernales. Quiero destacar que gente nos ha prestado dinero y ha sido un éxtio que hemos intentado compartir”, finaliza.