Enseñando la igualdad a través del juego
‘Pequeños amos de casa’ es un proyecto educativo para enseñar valores de corresponsabilidad y de igualdad de género a través de las tareas del hogar
Madrid
La filosofía es muy simple: si sabes usar un Smartphone, también sabes utilizar una aspiradora, un lavavajillas, una plancha o una lavadora, por no hablar de objetos menos tecnológicos y más rudimentarios como una fregona, una escoba, una bayeta o una esponja. Así surgió ‘Pequeños amos de casa’, observando a los niños en el día a día. Ana Sancho, una mujer emprendedora que vive en Burgos y que ideó el proyecto, se dio cuenta de que, a pesar de todo lo que se ha avanzado en el terreno de la igualdad, todavía queda mucho por hacer. Y comprendió que, para cambiar las cosas y propiciar un futuro mejor en ese ámbito, hay que empezar por el principio, construyendo desde la base.
'Pequeños amos de casa', enseñar la igualdad a través del juego
01:41
Compartir
El código iframe se ha copiado en el portapapeles
<iframe src="https://cadenaser.com/embed/audio/460/001RD010000004113752/" width="100%" height="360" frameborder="0" allowfullscreen></iframe>
Así que Ana creó un canal de Youtube, y empezó a grabar y editar vídeos, explicando en pasos sencillos cómo se realizan las tareas del hogar: desde hacer una cama a planchar la ropa, pasando por barrer y fregar el suelo, doblar una camiseta o limpiar los cristales de las ventanas. Todo está detallado en esos tutoriales, dirigidos a cualquier persona, aunque especialmente enfocados a los niños y niñas de entre 8 y 17 años dispuestos a iniciarse en el mundo de las tareas domésticas. “Lo que más me gusta de ‘Pequeños amos de casa’ es que es un proyecto educativo lleno de valores”, explica Ana Sancho. “Aparte de los de igualdad y corresponsabilidad, se fomenta la autonomía personal. Esto favorece una autoestima mayor, el grado de compromiso, el dar valor al trabajo de los demás, ser responsables y organizados, el trabajo en equipo”.
Sí, trabajo en equipo. Porque Ana concibe las tareas domésticas como algo en lo que toda la familia debe implicarse. Por eso, la actitud de la familia es esencial. “El papel de los padres es fundamental para que la iniciativa tenga éxito. Son los primeros que tienen que abrirse y dejar a sus hijos colaborar en casa, que sean partícipes de ese equipo. ¿Cómo? Haciendo las labores pero sin imposición, cada uno con lo que se sienta más cómodo o con lo que más le gusta hacer. Hay que crear el hábito, que lo hagan. Si el acabado no es el que esperábamos, no pasa nada. Lo bueno es que lo están haciendo”.
Concienciando desde la escuela
Ana siempre tuvo claro que, al margen de la actitud de los padres, la colaboración de la escuela iba a ser también muy importante para el proyecto. Por eso, lo explicó en centro donde estudian sus hijos, el colegio La Salle de Burgos que, desde entonces, se convirtió en el primer centro educativo que participa en esta iniciativa. Y no lo hace considerándola una actividad extraescolar, sino un trabajo en el aula. “Lo mejor es que conjugamos teoría con práctica. El entusiasmo, el empeño, la colaboración y el trabajo en equipo que demuestran es bastante motivador para seguir adelante. La experiencia me dice que vamos por el buen camino”.
Los alumnos de una clase, divididos en grupos, se trasladan a un hotel de Burgos que colabora en el proyecto cediendo sus instalaciones, para poner en práctica, como si fuera un juego, los conocimientos adquiridos. Mientras unos equipos revisan los vídeos tutoriales realizados por Ana Sancho, los equipos rivales, formados por los compañeros de clase, ensucian todo lo que, más tarde, los demás tendrán que limpiar. “Todo se hace de manera divertida. Los valores de igualdad los aprenden viviendo una experiencia que yo sé que les va a marcar. Esto no es una varita mágica. No quiere decir que desde hoy mismo todos van a estar colaborando en sus casas. Pero sí es un momento de reflexión y de concienciación. En esas tres horas que estamos trabajando juntos, estoy segura de que se dan cuenta de lo que es la vida y de lo importante que es esto para todos”, apunta Ana.
La intención es que la iniciativa ‘Pequeños amos de casa’ se extienda a otros colegios y a otras ciudades. Ana Sancho también cree que el proyecto podría tener cabida en la televisión, dentro de un programa de entretenimiento que apostara por transmitir estos valores de igualdad y corresponsabilidad. “Igual no es lo que más vende, pero yo creo que la sociedad está cambiando, y echamos en falta este tipo de programas que pueden ser también muy divertidos”.
Carlos Cala
Empieza en la radio en 1992, en la emisora de la Cadena SER en Morón de la Frontera, trabajo que simultanea...