Hannan: "Es posible que Dinamarca, Suecia o Irlanda quieran seguirnos"

Madrid

Daniel Hannan es una figura muy respetada dentro de los conservadores británicos. Dieciseis años después de llegar al Parlamento Europeo, confía en que los electores escojan la papeleta del 'LEAVE' (salir). A partir de ese momento, espera "encontrar un trabajo más útil que la regulación de todo en Bruselas". Reconoce que una derrota del brexit entierra el debate, pero no para siempre: "Será el último de los próximos 10, 15 o 20 años".

La UE no solo decepciona a los británicos

Daniel Hannan cree que la Unión Europea es "una decepción general, no particular de Reino Unido, porque falta democracia". Su descripción del proyecto europeo es la de "un sistema donde mandan los bancos, las corporaciones multinacionales y no hay voz para el ciudadano pequeño". Dicen que en Reino Unido no hay euroescépticos porque todos los son, pero Daniel Hannan no tiene tan claro el resultado del viernes: "Yo no tengo ninguna idea de lo que va a pasar". Y añade cierta épica a su actual batalla electoral porque "siempre es difícil ganar contra el statu quo". Los argumentos del hombre clave en el ideario brexiter culminan en lo que, para él, es una evidencia: "Si estuviéramos fuera de la Unión, nadie propondría ser miembros. Hay una tiranía del statu quo. Las instituciones europeas no quieren cambiar".

El papel de Reino Unido fuera de la Unión sería el de un aliado militar, que comerciaría libremente y que apoyaría en materia diplomática a sus aliados europeos. Y va más allá. Si el brexit gana, no descarta que "Dinamarca, Suecia o Irlanda quieran seguir los pasos de Reino Unido con una colaboración fundada en el comercio, la colaboración intergubernamental y no en la unión política".

Una campaña crispada

El asesinato de la diputada laborista Jo Cox ha hecho daño a los partidarios de marcharse, pero Daniel Hannan evita utilizar lo ocurrido para la campaña. Lamenta que "las acciones de un loco que tiene problemas mentales puedan cambiar las cosas, porque eso sería una segunda tragedia". Esta campaña ha tenido tintes xenófobos y ultranacionalistas, pero Hannan prefiere ver este debate como algo mucho más amplio porque, dice, también hay una fuerte implicación de laboristas y verdes que promueven "una vuelta a la democracia, no al nacionalismo, sino a la autonomía nacional".

Cameron, el político que llevaba Europa en los gemelos

La gran incógnita que se abrirá este viernes es el futuro político de David Cameron. Este peso pesado del consevadurismo recuerda que el primer ministro ha utilizado "palabras muy duras en esta campaña y ha defendido que el Brexit sería un desastre nacional". Esos discursos inhabilitarían, por tanto, a Cameron para ejercer como primer ministro en un Reino Unido fuera de la Unión. La búsqueda de un sucesor no rivaliza con el respeto a su compañero de partido, al que reconoce el mérito de haber promovido el referendum y su consistencia como político. ¿Si no fuera primer ministro David Cameron estaría haciendo campaña por el Brexit? La respuesta a la pregunta es un no rotundo acompañado de un retrato de la ideología y el estilismo de Cameron: "Cuando le conocí en los '90 llevaba gemelos con la bandera europea. Eso era muy raro en Reino Unido. Es un hombre de ideología europea".