Los herederos de Bob Dylan

Madrid

El folk y el country son los grandes géneros de la América que transcurre entre las grandes ciudades, la América profunda donde las raíces musicales perduran ajenas a las modas. Bob Dylan fue el gran abanderado de esa música, el hombre que tomó el testigo de los Pete Seegers o Woody Guthries y que guió a las siguientes generaciones de músicos. Su huella ha calado hondo y son muchos los artistas y las bandas que han seguido sus pasos. Bob Dylan se coronó a principios de los sesenta en el festival de Newport y en ese mismo escenario rompió con sus fieles cambiando la guitarra acústica por la eléctrica. Por ese festival han desfilado muchos de sus seguidores, músicos jóvenes que mantienen la tradición estadounidense viva y al día. La mayoría de estos músicos han tocado o aspiran a tocar en el festival de Newport, que cada año -desde la década de los cincuenta- se celebra en Rhode Island. Recopilamos algunos de los grupos y cantantes que han seguido los pasos de Dylan a través del festival de Newport.

Langhorne Slim

Langhorne Slim es uno de esos músicos herederos de una voz que recuerda a la de Bob Dylan. Langhorne Slim es un chico joven con una curiosa biografía a sus espaldas y un giro en su vida, el que dio tras la edición de ‘The way we move’ en 2012, el cuarto en una carrera que comenzó en 2004. Tras este disco Langhorne dejó de beber por unos problemas de alcoholismo que le han tenido un tiempo alejado de los escenarios y del estudio hasta el año pasado cuando editó ‘The Spirits Move’. ‘The way we move’ de todas formas, fue el disco que le dio a conocer en América, una joya positiva y enérgica con la que se presentó en decenas de festivales haciéndose su hueco, un espacio ganado a pulso.

Shovels and Rope

Shovels and Rope es una banda formada por dos músicos que empezaron a tocar juntos, se enamoraron y se casaron. Una bonita historia de amor rural salpicada de muy buenos discos. El dúo se dio a conocer en EEUU con ‘Birmingham’, tema que era parte del fabuloso ‘O’Be Joyfull’, un álbum editado en 2012 que te atrapa cantando a dos voces. En 2014 publicaron otro interesante trabajo titulado ‘Swiminng Time’ con el que se presentaron en Newport y el año pasaron publicaron un curioso disco de versiones cantadas con bandas amigas, allí estaba una genial versión del ‘Perfect day’ de Lou Reed junto a la Preservation Hall Jazz Band grabada durante el festival de jazz de Nuevas Orleans y este mismo mes ha visto la luz su nuevo trabajo, un excelente disco titulado ‘Little seeds’.

John Fullbright

John Fullbright comenzó a tocar joven y no tardó en subirse a los escenarios. A los 16 años recorría los pueblos cercanos a su granja en Oklahoma tocando en locales por comida o unas monedas. Tocaba durante horas hasta que perdía la voz, luego se iba a casa y volvía al día siguiente. Para entonces ya tocaba el piano, la armónica y la guitarra. En 2007 comenzó a frecuentar el Blue Door, un local de Oklahoma, a unos cien kilómetros de su pueblo, que se convertiría en su escuela musical. Poco a poco Fullbright comenzó a cantar sus propias canciones, composiciones que fueron llamando la atención del público y finalmente la del dueño del bar, que se rindió ante su música y se convirtió en su manager. En 2009, y sin haber grabado nada con anterioridad, editó su primer álbum, un espectacular directo con el que este veinteañero se presentaba en sociedad. Su nombre comenzó a circular por el condado, el estado y más tarde por todo el país. En 2012, Fullbright entraba al estudio con la idea de preparar algunas canciones que dieron forma a su primer disco de estudio, ‘From the ground up’.

Sons of Bill y Hollis Brown

Sons of Bill cautivó al público con ‘Love and Logic’, su tercer álbum editado en 2015. La banda formada por los tres hermanos Wilson honraron con el nombre de su grupo a su padre -el profesor Bill Wilson- y con su sonido a grupos como Wilco o REM aunque también recuerdan y mucho al estilo de The Band, el grupo canadiense que acompañó Dylan en los años eléctricos de los 60 y 70. Y con Bob Dylan conectan nuestros siguientes protagonistas, que tomaron su nombre de una canción del músico de Minnesota, ellos son Hollis Brown. Hollis Brown, una de esas nueva bandas que merece la pena escuchar, un grupo de chicos que entiende la tradición de la música americana y que comprende que para destacar hay que vivir la música y hacerla propia. Coger el pasado y pasarlo por las vivencias personales para dar a luz algo diferente y propio. ‘Ride on the train’ es un debut que contiene todo eso y que se presenta con la fuerza de una banda que es uno de los nombres a seguir de la escena que revitaliza la música de Nashville, una ciudad marcada por mil bandas de éxito y millones de aspirantes que nunca lo lograron.

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Natural Child

Natural Child acaba de editar nuevo disco –‘Okey Dockey’-, continuación de ‘Dancing with wolves’, un álbum que atrapa con fuerza y que llegó tras un parón en 2012. Tras de publicar dos trabajos casi seguidos, los chicos de Natural Child se dieron cuenta que se estaban alejando de su meta, del sonido que estaban buscando. Después de editar gran cantidad de material desde 2009, aquel verano los muchachos decidieron darse un respiro, un breve descanso que ayudase a aclarar las ideas, a definir los rumbos. Cambiaron a formato quinteto y dieron otros aires a su música. Así llegó el fabuloso ‘Dancing with wolves’ y este mes acaban de editar disco nuevo, un trabajo que brilla con ‘Now and them’.

Josh Ritter

Josh Ritter presentó el año pasado ‘Young Moses’, el último disco del músico de Idaho, un artista peculiar y simpático que siempre luce una gran sonrisa a pesar de que las cosas no siempre le han ido bien. Hace un par de años sufrió un varapalo sentimental que se consumó en un duro divorcio que Ritter plasmó en un disco, el crudo ‘The beast in its tracks’, pero la vida le depararía un inesperado giro de guion tras aquel golpe, apenas dos años después el músico visitaba España con nueva pareja y una niña pequeña a cuestas y ese momento de felicidad se ha plasmado en este último trabajo.

Ryan Bingham

Otra de las grandes voces de la música americana es la de Ryan Bingham. Hace un año le tuvimos en ‘Hora 25’ y nos estuvo contando su historia, una historia que comienza en el mundo del rodeo, con varios golpes bastante duros y de los que el músico se terminó levantando hasta ganar un Oscar por el tema principal de película ‘Corazón Rebelde’ (2009) interpretada por Jeff Bridges y en la que Bingham firmaba junto a T-Bone Burnnet el tema principal. Su última entrega es el sobrecogedor ‘Fear and Saturday night’, un disco que emociona con confesiones tan inesperadas como ‘Nobody knows my trouble’.

Luke Winslow King

Hace dos años, Luke Winslow King rompió la baraja con la edición de 'Everlasting arms', un álbum que mostró todo el talento de este músico que un día llegó a Nueva Orleans a tocar y que se acabó quedando en la ciudad a vivir después de que le robaran los instrumentos y el coche. Desde entonces, Luke se ha ido ganando un hueco en la ciudad más musical de Estados Unidos. El camino no ha sido fácil, comenzó tocando en la calle con un amigo italiano y a base de talento y trabajo ha ido dando forma a un interesante cancionero. Este mes ha llegado a las tiendas su nuevo trabajo, un álbum titulado con mucha intención 'Im glad trouble dont last always'. La nueva entrega de Winslow King mantiene la emoción de su anterior trabajo y avanza en ese cruce de sonidos entre el jazz, el folk y el country. Este mes vuelve a España tras su gira de hace dos años y su actuación en el último Azkena para presentar este trabajo intenso y breve que recomendamos mucho.

Sturgill Simpson

Tras varios años en Japón, sirviendo en la Marina de los Estados Unidos, Sturgill Simpson se cansó de todo, de aquella vida de horarios, jerarquías y disciplina. Dejó todo y se volvió a casa. Este joven, hijo de un policía de narcóticos, cambió el ejército por la guitarra y montó una banda de bluegrass. Tras unos años recorriendo el circuito local, Simpson se lanzó en solitario para grabar, en 2013, un debut que él mismo financió. Aquel disco se movía en las tradiciones del country, en el legado de los grandes forajidos del género. Un año después, Sturgill regresó al estudio con mejores medios y más conocimientos para grabar un disco tremendamente rompedor. ‘Metamodern sounds in country music’, un trabajo que mostró el talento y poderío vocal del músico de Kentucky, un disco en el que el country y el folk se mezclan con el rock y la psicodelia en un matrimonio bien avenido que dio a conocer la música de este joven de voz rota. De las 10.000 copias que despachó su debut pasó a más de 100.000 unidades vendidas y de los antros de media muerte pasó a tocar en las salas históricas de las grandes ciudades estadounidenses. Este mismo año Simpson ha editado nuevo trabajo –‘A Sailors guide to Earth’,confirmando que su apuesta por la música no pudo ser más acertada.