Morata enfrenta al Real Madrid y a la Selección
El conjunto blanco muestra su indignación por la lesión del futbolista y desde Las Rozas aseguran que se cumplió el protocolo habitual
Morata durante un entrenamiento con España / FACUNDO ARRIZABALAGA (EFE)
Álvaro Morata sufre una lesión de grado II en el bíceps femoral de la pierna derecha, lo que en condiciones normales le tendría un mes alejado de los terrenos de juego. El Real Madrid descubría esta noticia en la tarde del miércoles tras someter a su jugador a unas pruebas médicas en la capital de España.
La indignación en los pasillos de Valdebebas es máxima. Califican como irresponsable el compartimiento de la Federación y no entienden por qué no revisaron la pierna del delantero tras sufrir un golpe importante el sábado ante Macedonia. Zidane, que no da crédito con la noticia pues contaba con Morata ante las molestias que sigue arrastrando Karim Benzema, exige explicaciones.
Irrita en Concha Espina la poca profesionalidad mostrada por el 'staff' de la selección rechazando cualquier prueba tras el compromiso oficial de La Roja, si bien es cierto que el Real Madrid no presionó a la Federación para que liberara a Álvaro de viajar a Londres, como sí hizo el Barça con Sergi Roberto. Si tras hablar con el chico hubieran sospechado que había lesión, lo lógico hubiera sido solicitar de manera oficial su regreso a Madrid.
En Las Rozas tienen una versión trasparente de los hechos: Morata no se retiró del partido en Los Cármenes por lesión, su sustitución en Granda se explica por motivos deportivos y en las jornadas posteriores no se quejó a los médicos de ninguna dolencia. Nada más llegar al vestuario se produjo la primera comunicación entre el Real Madrid y la Federación, quedando pendiente una nueva conversación para el día siguiente dando así margen a unas primeras horas de espera.
Morata formó parte sin problema de los entrenamientos del domingo, del lunes y del martes y se informó al Real Madrid de esta evolución muy positiva. Tras jugar media hora ante Inglaterra, comunicó en el vestuario de Wembley a los doctores de la Selección que no tenía buenas sensaciones. Por ese motivo se recomendó por escrito al Real Madrid que analizara la pierna derecha de Morata, algo que el club blanco no confirma.
La gravedad de la noticia sorprende a la Federación y al propio futbolista, que sin cuestionar el diagnóstico, no salen de su asombro viendo las imágenes del partido. La celeridad con la que se han hecho las pruebas, sin esperar 48 horas como es costumbre, podría ser el detonante de un resultado tan negativo en la exploración.
