Los ganadores del I Campeonato de Cálculo Mental con nombre y apellidos

Madrid

En mitad de la huelga contra deberes durante los fines de semana convocada por la confederación de familias de los centros públicos CEAPA conocemos a un grupo de niños a los que no les importan los deberes, los de matemáticas, claro. Tienen entre 6 y 11 años y son los seis campeones del I Campeonato de Cálculo Mental organizado por Supertics, cuya final fue hace dos semanas en Madrid.

Pedro de la Cruz, de 6 años, logró resolver 50 operaciones en 50 segundos. De esta forma, se erigió como el ganador de 1º de Primaria. El pequeño de San Sebastián de los Reyes explica que lo más importante era concentrarse y no equivocarse al poner los números en la tablet. “Desde pequeño me gustan los números, contar y calcular. Así sabemos lo que cuesta cada cosa y podemos medir más rápido”, relata Pedro. “De mayor quiero ser futbolista e inventor de vacunas para que no se muera la gente”, afirma.

Álex Calleja, de 7 años, resolvió las 50 operaciones de la gran final en un minuto y tres segundos “aunque para la fase de clasificación llegué a hacer 45 segundos”, explica. “Las operaciones más complicadas fueron 7+5, 10-2”, confiesa Álex. El pequeño quiere ser jugador de baloncesto en los Chicago Bulls y, en este sentido, la utilidad de las matemáticas la tiene clara: “Yo las necesito para saber si vamos, ganando o empate, además para saber cuánto queda para que termine el cuarto”, explica.

Álex llegó a la final junto a su hermano Daniel, campeón de la Categoría 5 (correspondiente a 5º de Primaria). Provenientes de Cornellà (Barcelona) entrenaron con un ordenador portátil a través de una plataforma “para aprender a sumar, restar, multiplicar y dividir jugando contra monstruos”, explican. Daniel, de 10 años, consiguió el primer puesto con un tiempo de un minuto y tres segundos aunque su récord en la fase de clasificación fue 42 segundos. “La operación más complicada fue 19+14”, recuerda. “A mis amigos no les gusta las matemáticas tanto como a mí”, reconoce. “Me sirven cuando voy a un restaurante, para saber cuánto vale cada cosa y así sumarlo y saber si la cuenta está bien”, explica este pequeño que tiene claro que en futuro se dedicará a algo relacionado con los números.

“El problema en las escuelas es que se ofrecen sin alternativa, ‘hay que hacerlo exactamente así’, sin traducirlas a algo más asumible“, critica José Ángel Murcia, matemático y profesor. “Es necesario escuchar a los niños, acercarnos a su mundo; ofrecerles juegos y pedirles todo el rato la interpretación matemática de ese juego”, afirma Murcia.

El campeón de 3º de Primaria fue Alfredo Illera, de 8 años, que consiguió hacer las 50 operaciones en 45 segundos, menos de una operación por segundo. “Entrené todos los días en casa y en el colegio me dejaron una tablet para que también practicara”, explica Alfredo, de Valencia, que de mayor quiere ser futbolista. El pequeño confiesa que no le gustan mucho las matemáticas pero sí el cálculo mental porque “agiliza la cabeza”.

Abel Pallarés, de 9 años y natural de Barcelona, consiguió el primer puesto en la Categoría 4 (correspondiente a 4º de Primaria). El barcelonés hizo un tiempo de 56 segundos. “He entrenado unos 20 minutos cada día”, explica. “Me gustan los números, son importantes si, por ejemplo, vas al supermercado porque tienes que saber lo que cuesta cada cosa para ver que la cuenta este bien”, afirma Abel que de mayor quiere ser periodista deportivo.

El último en conseguir el título de campeón fue Elías López, de 11 años. Natural de Cornellà (Barcelona), Elías ganó en la Categoría 6 (6º de Primaria) con un tiempo de 49 segundos aunque su récord utilizando un ordenador (en la final competían con Tablet) era de 36 segundos. “Me gustan las matemáticas porque no se tienen que estudiar, creo que son importantes para los niños porque las podemos necesitar para cualquier cosa”, afirma Elías, que tiene muy claro a lo que se quiere dedicar: “de mayor quiero ser programador de videojuegos y cinemática 3D, para ello voy a necesitar un nivel alto de matemáticas”, declara.

Aprender jugando, divertirse haciendo matemáticas. Sí, es posible. Ellos son la prueba. Pedro, Álex, Alfredo, Abel, Daniel y Elías acaban de romper el mito: las Matemáticas ya no son de las asignaturas difíciles y ni, mucho menos, de las aburridas.