Los presidentes autonómicos reclaman un encuentro anual con el Gobierno

Madrid

Este martes se celebra, después de cinco años, la Conferencia de Presidentes. Una iniciativa de Rodríguez Zapatero que nació en 2004 para buscar la cooperación entre el Estado y las comunidades autónomas. Desde aquel momento, se han celebrado otras cinco. La última, propuesta ya por Mariano Rajoy, en octubre de 2012. Uno de los acuerdos a los que se pretende llega es que se fije anualmente esta celebración, un cónclave como órgano de máxima cooperación entre el Gobierno de España y las Comunidades Autónomas. Ximo Puig, presidente de la Comunidad Valenciana; Emiliano García-Page, presidente de Castilla-La Mancha; Uxue Barkos, presidenta de Navarra; Fernando Clavijo, presidente de Canarias; y Cristina Cifuentes, presidenta de la Comunidad de Madrid, debaten en una mesa especial de ‘Hora 25’ sobre los temas principales de la cita con Rajoy:

1.- Frecuencia de convocatoria

Los cinco presidentes autonómicos coinciden en que sería positivo para la relación entre las comunidades y el gobierno central celebrar las Conferencias de Presidentes con más asiduidad. La cita de este martes es la primera que se celebra desde 2012. "Más vale tarde que nunca" asegura la presidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes, mientras Ximo Puig, presidente de la Generalitat valenciana se niega a que este órgano "sea un instrumento del Gobierno para cuando le interese", así que propone que se abra la puerta a que la comunidades autónomas también tengan el poder de convocarlo. Emiliano García Page, presidente de la Junta de Castilla-La Mancha, considera que el diálogo “debería ser una obligación institucional" y propone que cada cita tenga un orden del día para "llegar a acuerdos o debatir sobre cuestiones concretas".

Sobre la mesa esperan debatir cuestiones como la financiación autonómica, el coste de la ley de dependencia, el reto demográfico, el empleo público o la ley educativa. Unos retos que son "un escaparate de la pluralidad" que hay en España, dice la presidenta de Navarra, Uxue Barkos, y que Cifuentes, al margen de diferencias ideológicas, cree que son "muy parecidos y comunes entre unas comunidades y otras".

Ampliar

2.- Financiación autonómica

• Uxue Barkos: "Es un debate que hay que abordar desarmando el interés partidista, teniendo el conocimiento de la estructura económica del Estado, lo intereses que compartimos y las necesidades de cada comunidad - que poco varían de unos a otros- y sobre todo, tener en cuenta dos conceptos básicos: solidaridad y responsabilidad"
• Emiliano García Page cree que la cuestión es "¿qué parte de la tarta financiera estatal del conjunto del país tiene cada administración y se va a mover la tarta o no? Porque si el Estado no cede no hay nada que hacer"
• Cristina Cifuentes defiende la baja fiscalidad de su comunidad "en Madrid pagan menos impuestos, pero somos los que más recaudamos" y reivindica la opción política que tiene cada comunidad autónoma de aplicar unas políticas fiscales u otras.
• Ximo Puig: "La financiación autonómica es la madre de las batallas por tener que garantizar dos cuestiones: la singularidad y la igualdad entre los ciudadanos"

3.- La ley de dependencia

Emiliano García Page ha puesto a debate la cuestión del coste de la ley de dependencia: "El Gobierno puso primero el 50% del gasto y luego se ha ido retirando", asegura. Por eso es fundamental, dice Cifuentes, "que cualquier compromiso de cualquier ley estatal vaya acompañado de una contraprestación económica indudable". En el caso de Valencia, por ejemplo, "el Estado solo aporta el 14% del coste de la ley" asegura Ximo Puig y lo mismo ocurre en Canarias, y por eso, Clavijo admite "reconocer un derecho al ciudadano pero que si no va a compañado de una ficha financiera adecuada, pues colapsa".

Ampliar

4.- Fernando Clavijo y el déficit

Sobre el déficit, el presidente de Canarias cree que habría que aplicar correctores en función de las singularidades de cada comunidad autónoma. Clavijo no está de acuerdo con la cuestión del déficit porque cree que uno "se puede endeudar para pagar un coche o una casa, pero no para pagar el colegio de los niños". Y en este país, apunta, "se ha hecho abuso por parte de todos de utilizar el endeudamiento para pagar el gasto corriente, y esto no es sostenible"