The White House doesn't speak spanish
Los 47 millones de personas que hablan español en EEUU ya no encuentran ninguna referencia en español en la web de la Casa Blanca
La Opinión de Pepa Bueno: 'The White House doesn't speak spanish'
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Madrid
Unos 47 millones de personas hablan español en Estados Unidos y desde este fin de semana ya no encuentran ninguna referencia en español en la web oficial de la Casa Blanca. Los latinos han estado en el objetivo del nuevo presidente, de Donald Trump, prácticamente desde el comienzo de su carrera política y junto a las referencias y servicios que la web ofrecía sobre violencia de género, derechos LGTB, cambio climático o seguro de sanidad que también se han suprimido… finalmente ha desaparecido la pestaña 'en español' y con ella la información de servicio ofrecía a la minoría mayoritaria de ese país, los hispanos.
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Nadie de la nueva Administración ha salido a decir que son cambios en la web transitorios y que todo volverá a su sitio. Así que podemos interpretar que se trata de un nuevo gesto que retrata al anglocentrismo del nuevo presidente y su aversión a la diversidad. No sabemos si el gobierno español se sentirá en la obligación de adoptar alguna iniciativa política ante la nueva Administración estadounidense por este menosprecio a nuestro idioma y a los derechos de quienes lo hablan. Si tienen curiosidad métanse en la web del gobierno de España y verán como arriba del todo se ofrecen las pestañas que remiten a la información en los idiomas del estado: castellano, català, galego, euskera, valencià pero incluso ofrece la posibilidad de leerlo también en inglés.
Y en Estados Unidos, por cierto, no existe constitucionalmente una lengua oficial, tampoco el inglés. Las lenguas como barrera y no como puente u oportunidad. De eso sabemos algo por aquí. Y de puertas para fuera, en política exterior, también se pueden ir sacando conclusiones de las dos primeras citas que el nuevo presidente ha fijado en su agenda. La primera Theresa May, la primera ministra del Brexit de la ruptura con la Unión Europea a la que verá este mismo viernes. La segunda con Benjamín Netanyahu, el primer ministro de Israel. Se verán a primeros de febrero pero ayer ya mantuvieron una larga conversación telefónica en la que según la Casa Blanca hablaron del acuerdo nuclear con Irán y de trasladar la embajada estadounidense de Tel Aviv a Jerusalén. La reunión de febrero puede suponer la reconciliación entre los dos países después de las difíciles relaciones de Obama con Israel. ¿Y Europa? No figura en su agenda de momento.