Preparan un remake de la boda de Ana Aznar dentro de Alcalá-Meco

Bilbao

Esta semana ha continuado el proceso de la Gürtel o, como lo llaman en el PP, Operación Confeti Maldito. De momento, el juez ya ha enviado a prisión a Correa, Crespo y al Bigotes. Por cierto que, en un jugada legal maestra, el Bigotes se ha dejado barba, pero no ha colado. Esa maldita Guardia Civil está en todo.

Es importante señalar que, con la entrada de estos tres sujetos en prisión, ya se podría hacer un remake de la boda de Ana Aznar dentro de Alcalá Meco.

En el juicio también ha declarado Ana Mato, la única persona incapaz de distinguir un Jaguar de un Ford Fiesta. Este fenómeno es tan extraño que la OMS no descarta incluirlo en su lista de enfermedades con el nombre de anamatosis.

Mato aseguró al tribunal que su marido y ella tenían las labores domésticas repartidas. Ella, en concreto, se encargaba de la plancha y los baños, y su marido de aceptar sobornos de tramas corruptas.

Además, es la primera vez en democracia que un partido político se sienta en el banquillo. Según Rajoy, esto demuestra que el PP tiene un firme compromiso con la innovación. No se descarta que en próximas fechas los populares desarrollen otras iniciativas novedosas como abrir una oficina dentro de la trena o lanzar su propia línea de puños americanos.

Al PP se le acusa de haberse lucrado de un delito sin participar en él. Que, si lo piensas, es el colmo de la holgazanería. Es una cosa como muy española: ganar dinero con un delito, pero que lo haga otro. En el PP son tan liberales que hasta subcontratan el crimen organizado.

Si el juez concluye que el PP de verdad se lucró de actividades ilegales, su intención de voto podría aumentar hasta diez puntos y recuperar así la mayoría absoluta. El PSOE, por su parte, ya ha anunciado que, de confirmarse esta causalidad entre delito y voto, empezará a asesinar ancianos.