Las plumas no fueron creadas para volar

Madrid

La ciencia no deja de sorprendernos, porque nuevas evidencias científicas demuestran que la capacidad de volar evolucionó de una forma mucho menos lineal de lo que parece, según explica la Universidad de Edimburgo, en un trabajo publicado en el último número de la revista Science.

Los últimos descubrimientos fósiles sugieren que el desarrollo del vuelo fue algo más bien caótico, porque las plumas emergieron como filamentos parecidos a los pelos, que adquirieron los primeros dinosaurios, lo más probable, para protegerse de la insolación o como sistema de camuflaje para poder ocultarse de sus depredadores.

“Miles de fósiles encontrados en China a finales de la década de 1990 demuestran que muchos componentes anatómicos del aparato volador de los pájaros modernos evolucionaron poco a poco en los dinosaurios durante decenas de millones de años por razones ajenas al vuelo”, explica el investigador principal de este estudio Stephen Brusatte.

Alas no voladoras

Un estudio reciente que valora el potencial biomecánico de diferentes formas alares basadas en registros fósiles y el resultado apoya la hipótesis de que las alas se desarrollaron por razones no relacionadas con el vuelo y, por lo tanto, la capacidad de volar vino después debido a la evolución natural de las diferentes especies de dinosaurios.

En resumen, había dinosaurios alados que podían remontar el vuelo y otros no, según las características biomecánicas de sus extremidades. Y de todos ellos, hace 65 millones de años, sólo sobrevivieron los pequeños lagartos voladores que hoy llamamos “aves”.