Juan Pablo Escobar: "Hay quien quiere matarme por no seguir los pasos de mi padre"

Madrid

Fue un niño que en la fantasía que provocaba ser el hijo de uno de los hombres más poderosos y ricos de principios de los ochenta, llegó a soñar con que un día su padre le traería a casa a su ídolo Michael Jackson para tocar para él y su familia. Eran años en los que todo era posible en la Finca Nápoles del narco Pablo Escobar. Pero, como nuestro invitado ha reconocido con el tiempo, no hay narco que no pase parte de su vida en la cárcel o muera sin llegar a viejo. A él, la realidad le llegó de golpe a los 16 años. Hacía minutos que había hablado con su padre y una periodista le comunicó que su padre, Pablo Escobar, había muerto. En ese momento juró vengarlo, pero ya en frío, cuando los medios de comunicación volvieron a llamarlo, dejó claro que no repetiría la vida de su padre. Y esa búsqueda de la paz encaminó la vida de Juan Pablo Escobar.

"Hay personas que me quieren matar por no seguir los pasos de mi padre", ha reconocido Escobar, que estudió arquitectura y diseño industrial y se dedica a ello. Hace veintitrés años, los mismos que han transcurrido del asesinato de su progenitor, prometió no vengar la muerte de su padre y no continuar con su trayectoria, que era para lo que estaba predestinado. Y lo logró: "Cada día cuando me levanto elijo no convertirme en Pablo Escobar 2.0".

Tenía 16 años cuando mataron a su padre, pero desde los siete conocía ya a qué tipo de actividad se dedicaba. Lo supo cuando su familia se tuvo que ir a vivir a Panamá huyendo de sus enemigos. Su padre se lo contó sin tapujos. "Es más, veíamos los noticieros y me decía los asuntos en los que estaba implicado. Algo difícil para él, como padre, imagino yo", ha confesado Escobar, que ha asegurado que a pesar del modo de vida de su padre se crio en un hogar con mucho amor. Eso sí, rodeado de delincuentes: "Los peores bandidos de Colombia fueron todos mis niñeras".

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Este segundo libro, titulado Pablo Escobar: Lo que mi padre nunca me contó, está teniendo bastante éxito en todo el mundo. Bueno, en todo el mundo no. En Colombia no. "Es paradójico, pero es que revela cuestiones que son difíciles de asimilar", ha apuntado Escobar, que ha recordado cómo su padre logró someter a todo un país, que cambió la Constitución y sacó leyes a su medida, como un traje: "Fue el primer bandido de la historia de la humanidad que se construyó su propia cárcel. Todo esto no hubiera sido posible sin la corrupción que yo muestro en el libro".