El termómetro del proyecto europeo

Ámsterdam

Aunque las elecciones de Holanda son generales, miden mucho más que la composición del parlamento nacional. Desde aquí podremos contarles mañana hasta qué punto la temible ola ultranacionalista, autoritaria, anti europea y xenófoba ataca al corazón de uno de los países fundadores de la Unión Europea. Por primera vez tiene posibilidades de ser el más votado un candidato Gert Wildersque promete un Nexit, una nueva ruptura del proyecto europeo. Aunque los últimos sondeos le daban empate o ligeramente por debajo del partido liberal actualmente en el gobierno. Wilders, un radical peligroso para unos, o un aldabonazo al sistema para otros holandeses.

Pero Ámsterdam es toda Holanda, el termómetro de la tolerancia de esta ciudad puede inducir a error. Como pasó en Londres con el Brexit, con esa brecha entre las ciudades y el resto del país que empieza a abrirse en muchos lugares. Aunque también nos advierten de que las comparaciones son engañosas, que Holanda no es Reino Unido, que aquí nadie se toma en serio el Brexit. Ya ven, nadie sabe nada con exactitud, y este sí parece el signo de los tiempos.

La tele holandesa emitió anoche horas debates sucesivos cara a cara de todos los líderes políticos en unas elecciones en las que tienen posibilidad de entrar al parlamento unos 12 partidos principales. Ninguno en el último siglo ha conseguido mayoría absoluta. Y es esa fragmentación la única esperanza de que, aunque Wilders sea hoy el primero o el segundo más votado no entre en el gobierno, porque aquí tienen que coaligarse tres o cuatro partidos, y ninguno quiere gobernar con él.

Unas elecciones atravesadas por la influencia internacional. Turquía, Trump y Rusia también forman parte del debate aquí, con injerencias directas. De hecho, el recuento de votos se va a hacer manualmente por temor a un hackeo.

Vamos a tratar de entender cómo un país sin grandes problemas económicos, (aquí hay solo un 5 por ciento de paro, una deuda pública controlada y un 11% de inmigración)... Un país con elevados niveles de bienestar donde uno elige la vida que quiere llevar y no la que le imponen las circunstancias, un país en fin, paradigma de las libertades y de tantas vanguardias, es hoy un país con una parte importante de su población que compra el lema aterrador de 'Holanda para los holandeses'. El mismo que divide a Estados Unidos y el mismo que amenaza a Francia.