El embajador ruso en España: "Es una agresión a un país de Naciones Unidas"
Yuri Korchagin ha dicho en la SER el ataque "socava los esfuerzos que hemos hecho en el pasado" y que debe de haber una investigación antes de aprobar una resolución en Naciones Unidas. "El ejército sirio no tiene armas químicas", ha asegurado
El embajador ruso en los estudios de la Cadena SER. / JUAN ANTONIO MERAYO
Madrid
El embajador ruso en España, Yuri Korchagin, ha afirmado esta mañana en los estudios de la SER, que el ataque de EE. UU. a Siria de esta madrugada "es una agresión a un país soberano miembro de Naciones Unidas" y que la acción "socava los esfuerzos que hemos hecho en el pasado".
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Korchagin ha hecho un llamamiento a la comunidad internacional para que se investigue "minuciosamente" lo ocurrido el martes en Siria y ha remitido a la declaración del Ministerio de Defensa de su país realizado en el que afirma que el Ejército sirio bombardeó una fábrica de armas químicas. "El ejército sirio no tiene armas químicas porque comprobado, no tienen ni medios para producirlas. Fueron eliminadas bajo el control internacional", ha asegurado.
El embajador ruso en España: 'Es una agresión a un país de Naciones Unidas'
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Korchagin ha explicado, en la entrevista en Hoy por hoy con Gemma Nierga, que Rusia es aliado con Siria en la lucha contra el terrorismo internacional por invitación del Gobierno "legítimo" sirio y que, en cambio, la coalición internacional se encuentra allí sin "invitación". "Tratamos de encontrar puntos comunes para unir esta lucha contra el terrorismo entre Rusia y Estados Unidos", decía.
El diplomático está preocupado por la mala imagen que la mirada internacional posa sobre Rusia. Diferencia dos tendencias dentro de lo que denomina como 'rusofobia', es decir, el intento de culpar al país de los males que existen. La primera vertiente consiste en denigrar a la región por su fisionomía o su economía, que, según el diplomático, fue la postura que adoptó Barack Obama. Por otro lado, explica que existe la visión opuesta, en la que se considera a Rusia como una potencia omnipotente. "El objetivo es el mismo: imponer a la opinión pública la imagen de enemigo", explicaba. Aclaraba así que el fin que adoptan con la política exterior, no es otro que ser un aliado y velar por la seguridad de la población rusa.
La invasión de Crimea fue uno de los episodios que contribuyeron a la mala imagen. El embajador no ha criticado esta acción, sino todo lo contrario. "Fue un pueblo que tomó la decisión de independizarse y unirse a Rusia", decía con aprobación.
Por último, ha propuesto una solución decisiva para desmentir la realidad que envuelve a la potencia soviética. "Hay que visitar Rusia y comprobar lo que está pasando in situ, no leer los periódicos que dan una mala imagen y mienten", concluía.
