¡Chúpate esa, Mariano!

Soy Esperanza Aguirre, y vengo a contarles que he dimitido del último cargo público que me quedaba: concejala y portavoz del PP en el Ayuntamiento de Madrid. Es que a mí me gusta mucho dimitir, que es la tercera vez que lo hago.

Primero fue en septiembre de 2012, cuando dejé la presidencia de la Comunidad en manos de Ignacio González, ese chico tan simpático y tan listo que me ha salido rana. Después dimití en febrero de 2016 como presidenta del PP de Madrid.

Trincaron a mi fiel escudero Paco Granados con la mano en la masa de billetes, y entonces dije que me iba por “responsabilidad política in eligiendo” al nombrar al tal Granados, y además “in vigilando” por no controlar su labor. Una vez dicho aquello, ahora solo tenía que repetir lo mismo aplicado a mi querido Nacho, hay que ver qué disgusto.

No sé lo que me pasa, pero tengo muy mala suerte. Anoten a todos los que andan por banquillos o directamente en el trullo: el ex viceconsejero López Viejo; el exconsejero Granados; la ex consejera de Educación, Lucía Figar, el también exconsejero de Presidencia, Salvador Victoria, el director general del Juego, Ginés López; alcaldes, diputados…

Me voy pero le dejo un recadito envenenado al presidente: yo habré vigilado poco, pero anda que tú con Bárcenas…

¡Chúpate esa, Mariano!

Firmado, Esperanza Aguirre.