El plan de Ámsterdam contra la obesidad que sí está funcionando
La capital de los países Bajos emprendió en 2012 una cruzada muy particular para reducir los niveles de sobrepeso y obesidad de los más pequeños. Los primeros resultados avalan la estrategia de esta ciudad para hacer frente a una de las epidemias del siglo XXI
Madrid
Hace cinco años que Amsterdam decidió hacer frente a al aumento del sobrepeso entre los niños de la capital con un plan diseñado barrio a barrio. Las autoridades municipales se implicaron y decidieron implicar a todos los centros educativos, las familias, los entrenadores deportivos y el personal sanitario para frenar el incremento del sobrepeso en los menores. El plan diseñado tiene como objetivo el año 2033, fecha en la que se quiere alcanzar el objetivo de peso saludable para todos los niños de Amsterdam.
La forma de conseguir obesidad y sobrepeso cero entre los menores pasa por cambiar los hábitos de vida de muchos de ellos. La tarea no es fácil y pasa por la prohibición de llevar determinados alimentos a la escuela. Por ello, desde hace cinco años, los niños de esta ciudad no pueden incluir en su desayuno ni zumos ni bebidas azucaradas, sólo se permite llevar a las aulas leche o agua. También se ha prohibido la bollería industrial, se permiten los dulces caseros y la fruta. Además las marcas de comida rápida y refrescos con azúcar no pueden patrocinar ni estar representadas en los eventos escolares deportivos. Para enseñar a los pequeños a comer de forma saludable se imparten cursos colectivos de comida sana. Otro de los elementos fundamentales de este plan es el control y el estudio de los patrones del sueño. Los expertos consideran que dormir es fundamental para que el metabolismo trabaje bien a lo largo del día.
El plan, que se puso en marcha en 2012, llegará hasta el 2033 y se revisa de forma periódica. Los primeros resultados de esta actuación demuestran que está funcionando. De momento, sólo en los primeros tres años el número de niños con sobrepeso en la capital de los Países bajos se ha reducido en un 12%.